Turquía, Amadeus, BBVA, Berkeley, Bayer... los protagonistas de la semana
La crisis turca ha sido la que ha dirigido la evolución de los mercados en las cinco últimas sesiones, pero también ha habido historias particulares de empresas que se han dejado sentir en las cotizaciones.
Turquía ha marcado el devenir de los mercados en la última semana. Su elevado déficit por cuenta corriente, la reducción de la liquidez en los mercados por la retirada del apoyo de los bancos centrales de los países desarrollados y su choque con Estados Unidos provocaron que la lira entrara en caída libre. Ello, con dos posibles consecuencias de potencial alcance sistémico que empezaron a poner en precio los inversores: nefastas repercusiones en el sector financiero europeo y contagio al resto de los países emergentes, puesto que Turquía podría convertirse en la sirena de aviso para que el dinero salga de todos ellos. Pero a esos riesgos, los analistas han introducido matices: la situación de Turquía es única, no hay muchos países más en su misma situación; y los bancos tienen suficiente capital para absorber sin dificultades las posibles pérdidas asociadas al país euroasiático.
Las medidas adoptadas por el Gobierno turco, desde los límites a las posiciones cortas hasta las subidas de los tipos efectivos, además del apoyo de Qatar, pusieron freno a la lira y ésta rebotó. Pero el viernes, con el nuevo choque con Estados Unidos a cuenta del pastor americano al que el régimen de Erdogan tiene en arresto domiciliario acusado de vínculos con el terrorismo, la lira volvió a bajar y Europa volvió a mostrarse muy sensible. Por tanto, todo parece apuntar que la crisis está lejos de estar resuelta y que sus consecuencias aún no se pueden conocer con certeza.
Debido a la crisis turca, BBVA ha estado en el punto de mira todos estos días puesto que tiene una participación de casi el 50% en el banco Garanti y porque además tiene buena parte de su cartera de crédito expuesta al país. Desde que la crisis turca saltara de su ámbito local a los mercados internacionales, el pasado 10 de agosto, las acciones de la entidad han caído un 8,5%, un porcentaje que sólo supera ArcelorMittal, que baja casi un 9% en el mismo periodo. Sabadell y Santander (éste, por su dependencia emergente) retroceden más de un 7% en estas seis últimas sesiones. Moody's afirmó que el problema de Turquía es manejable para BBVA y los analistas de Royal Bank of Scotland reiteraron su visión positiva sobre el banco y afirmaban que su caída había sido excesiva. Pero los nervios no han desaparecido.
No todo ha sido Turquía en la última semana. Como decíamos, en las últimas seis sesiones y también en las cinco de la última semana, ArcelorMittal ha sido el peor valor. Ello porque las materias primas han tenido una semana muy mala: hay temores sobre la evolución de la demanda y respecto a las repercusiones que pueda tener la guerra comercial (pese a que China y EE.UU. han anunciado que reanudarán sus negociaciones a partir de finales de julio), las turbulencias en los emergentes y la apreciación del dólar.
De todas maneras, la fuerte caída de la acerera no ha sido nada en comparación con el verdadero desplome que ha registrado Berkeley Energía, la compañía que salió a Bolsa el pasado 18 de julio: se ha hundido un 77% en las cinco últimas sesiones tras haber caído un 7% en la semana anterior. La compañía ha pasado de acumular una revalorización del 590% el pasado 7 de agosto cuando marcaba máximos en los 3,27 euros a avanzar apenas un 22% ahora, tras haber cerrado el viernes cambiándose por 0,58 euros. La razón del desplome, posiblemente, la advertencia que lanzó esta semana la CNMV, que avisaba de que los títulos de la compañía cotizaban a un precio "tremendamente más elevado" en la Bolsa española que en las de Londres y Sidney, donde también está listada. De acuerdo con el regulador, este fenómeno es un hecho anómalo que podría responder a la desinformación de los inversores. El desajuste, con las últimas caídas, se ha reducido.
La semana también ha sido un calvario para Bayer. En las cinco últimas sesiones ha bajado un 16% a cuenta de la multa que tendrá que pagar su recién adquirida Monsanto a un jardinero estadounidense enfermo de cáncer que utilizó sus productos con Glifosato como componente. La justicia le ha dado la razón y ahora Monsanto, con ese precedente, podría tener que enfrentarse a una lluvia de demandas de personas que hayan trabajado con sus compuestos y que también estén aquejadas por la enfermedad.
Atlantia, en Italia, ha caído un 21,80% esta semana, coincidiendo con el trágico derrumbe del puente de Génova. El Gobierno del país anunciaba el viernes por la tarde que ha iniciado el proceso para revocar la concesión de la gestión de las carreteras italianas. En España, ACS ha registrado una caída del 4,15%, seguramente en parte atribuible a que es socia de la italiana en Abertis.
Aunque la semana ha sido turbulenta, ha habido valores para los que no ha habido crisis bursátil, sino todo lo contrario. Por ejemplo, para Amadeus, que cierra la semana con una subida del 4,5% tras la adquisición de la estadounidense Travelclick. Según comenta Mario Lodos, analista de Banco Sabadell, la operación "tendrá un impacto acretivo inmediato". Además, en su opinión, "la compra tiene sentido estratégico: Amadeus consolidará su posicionamiento en el mercado de hoteles para potenciar sus ingresos de nuevos negocios y la profundidad de las soluciones de Travelclick permitirá atender un mayor número de clientes". Esta compañía es también la más rentable del Ibex-35 este año, con un avance de más del 25%.
Otro valor ganador de la semana ha sido Walmart, que ha subido más del 8% en el Dow Jones en las cinco últimas sesiones, tras la presentación de sus últimos resultados. Gustó, fundamentalmente, el fuerte crecimiento de sus ventas, el mayor en más de diez años, y que batiera expectativas con sus números.