Mercado inmobiliario de principales urbes chinas se enfría tras restricciones

El mercado inmobiliario de las principales urbes chinas ha empezado a enfriarse tras las medidas adoptadas en los últimos días[…]

El mercado inmobiliario de las principales urbes chinas ha empezado a enfriarse tras las medidas adoptadas en los últimos días por las autoridades locales para atajar la escalada de los precios de la vivienda, según datos publicados hoy.

Las ventas de viviendas en Pekín se redujeron a la mitad en la primera semana de octubre, se firmaron un total de 216 contratos, frente al mismo periodo del año pasado, cuando ascendieron a 442, informó la cadena de televisión oficial CCTV.

Este descenso llega después de que el gobierno municipal de la capital china decidiera, el pasado 30 de septiembre, subir el pago mínimo inicial que deben realizar los compradores de una vivienda hasta el 35 % para la primera residencia (frente al 20 % anterior) y al 50 % para la segunda (que antes era del 30 %).

Otras ciudades que adoptaron medidas similares, como Tianjin o Nankín, también han experimentado reducciones del volumen de ventas, señaló CCTV, aunque se produjeron en una semana de vacaciones con motivo del Día Nacional de China.

Publicidad

Las principales ciudades del país están tratando de frenar la creación de una burbuja inmobiliaria a través de medidas que van desde las subidas de los pagos mínimos iniciales hasta las restricciones al crédito.

Entre el pasado 30 de septiembre y el 8 de octubre, un total de 21 grandes ciudades chinas -incluidas Pekín, Shanghái, Cantón y Shenzhen- han revisado alguna norma para intentar enfriar el mercado inmobiliario.

Las últimas en sumarse a esta tendencia fueron Shanghái, Chengdu y Nanchang, donde se elevaron los pagos de las entradas, se incrementaron las tierras destinadas a las viviendas de protección oficial y se endurecieron los requisitos para la concesión de hipotecas.

Sin embargo, la firma de análisis Capital Economics advirtió hoy en una nota de que estas correcciones en la demanda inmobiliaria repercutirán en un menor crecimiento económico, aunque reconoció que las alzas de precios de los últimos meses "no son sostenibles".

El mercado inmobiliario chino lleva un año encadenando fuertes subidas mes a mes, especialmente notorias en las grandes urbes, aunque resulta difícil calibrar la magnitud de ese fenómeno, porque las autoridades del país no publican estadísticas nacionales sobre el sector.

La Oficina Nacional de Estadísticas divulga mensualmente datos de la evolución del precio de la vivienda en las 70 mayores ciudades chinas que, en agosto, reflejaron que 62 de esas 70 urbes registraron aumentos interanuales de los precios de las residencias nuevas.

Xiamen, con un ascenso del 44,3 % en los doce meses que concluyeron en agosto, experimentó el mayor incremento.

Pero también hubo aumentos muy fuertes en las principales metrópolis chinas, como Shanghái (37,8 % interanual), Shenzhen (37,3 %) y Pekín (25,8 %).

A pesar del momento de auge que vive el mercado inmobiliario en las principales ciudades, los expertos ven la demanda más estancada en las de tamaño medio y pequeño, donde hay un gran número de viviendas construidas a la espera de comprador.

Para dar salida a ese inventario de casas vacías, el Banco Popular de China (central) rebajó en septiembre del año pasado los depósitos obligatorios nacionales para la compra de vivienda hasta el 25 % de su valor, una decisión que ha acabado espoleando la demanda en las ciudades más grandes.

En portada

Noticias de