Ya no hay conejos en la chistera, el cierre semanal puede dar la puntilla al rebote

Mal, muy mal se han tomado las bolsas el inicio de la cumbre europea. Ayer ya empezamos la jornada con el esperado recorte del BCE en 0,25 puntos para dejar el tipo de interés al 1%, donde se debió haber quedado cuando apenas había visos de que se podía salir de la crisis con la reactivación económica. Pero luego Draghi, al mejor estilo de su predecesor Trichet, se encargaba de aguar la fiesta rebajando expectativas y matizando. La barra libre de liquidez para los bancos alargada por tres años quedaba en nada vistas las limitaciones de actuación que se recalcaban y la supeditación a los resultados de la reunión, así que ni los mejores datos de los previstos en Estados Unidos lograban frenar las ventas, que fueron masivas en muy poco espacio de tiempo. De nuevo, pasando mucha factura al sector bancario.

Las continuas noticias y rumores se fueron interpretando con negatividad y en el final del cierre de sesión americano se produjo un cruce de noticias procedentes de la eurocumbre, que primero se interpretaban favorablemente y permitían reducir de forma rápida las pérdidas que se acumulaban, para en apenas 15 minutos para volver a desmentirse y arreciar aún más las ventas y acabar prácticamente en las zonas de mínimos al igual que las plazas europeas.

Lo decíamos anteayer: parece que "esta vez tampoco va a ser diferente". Los mercados han quedado frenados en sus zonas de resistencia clave y, ante la ineptitud que siguen mostrando los pseudolíderes europeos incapaces de llegar a un acuerdo, los retrocesos nos han dejado justo en los niveles que ponen en riesgo los rebotes y patrones de continuación. Y si en la jornada de hoy no se logra algo positivo, lo más normal es que se pierden estas referencias y comiencen de nuevo la búsqueda de las zonas de soportes y se incremente el riesgo de entrada en los escenarios bajistas que, tal y como hemos venido comentando, aún no se habían podido anular.  Un nuevo tratado con una Europa más dividida, tras el veto inglés, sin eurobonos... apenas quedan conejos en la chistera para la sesión de hoy, que apunta a nuevas correcciones y que sólo sería positiva si fuera una jornada de menos a más.

El dólar perdía el nivel de los 1,3400 de forma muy clara marcando la pauta de correlación inversa con la renta variable, y en los mínimos alcanzados también se dejaba el nivel de los 1,3300 que recuperaba al cierre y que por el momento pugna por mantener en el inicio de la sesión de hoy. Se puede mascar la visita a la zona de los 1,3200 y de perderse este nivel no quedará más remedio que atenerse a las consecuencias: más recortes para las bolsas.

El siguiente objetivo sigue sin cambios en los 1,3000 y después en los 1,2800. La resistencias de corto plazo son claves para apoyar los avances. Quedaron intactas en los 1,3500, a los que ni se acercó, y su extensión hasta los 1,3600 necesaria para validar cualquier avance mayor. Vista la situación parece una quimera pensar en recuperar las zonas clave de los 1,3800-1,4000, que son los apoyos necesarios para pensar en un escenario alcista que se diluye cada vez más. Estamos ya de nuevo en los mismos niveles antes de la intervención de los bancos centrales, así que esta vez ni una semana habrá durado su impacto.

El Dow Jones cerró en los 11.997,70 puntos, perdiendo de forma testimonial los 12.000 puntos al cierre, muy próximo a los mínimos de la sesión. Queda justo parado en el nivel para no confirmar la pérdida del patrón de continuación que venía forjándose durante la semana. Pero si al cierre de hoy no se han revertido las correcciones y se recupera por encima de los 12.100 puntos quedará muy tocado, especialmente si vuelve a quedar por debajo de la proyección de la media móvil de 200 sesiones está situada en los 11.940 puntos aproximadamente.

No tenemos cambios en los niveles importantes que siguen pendientes de superarse. Están en el rango comprendido entre los 12.300 puntos y los 12.500 puntos para poder modificar el escenario y pasar a un nuevo modo impulsivo que nos dejaría abierto el camino a buscar los 13.000 puntos. La debilidad nos lleva a mostrar la preocupación por las zonas de soporte, especialmente si se pierden los 11.900 puntos, ya puede darse un ataque a la zona de los 11.700 puntos que provocaría la situación de una nueva entrada en el canal que se vería confirmada con la pérdida de los 11.500 puntos.

Dentro del canal, seguimos el manteniendo primer nivel de soporte en los mínimos anteriores sobre los 11.200 puntos. Perder esta referencia nos llevaría probablemente a atacar la zona de bajos del canal y el nivel clave para la entrada en escenario bajista que seguimos teniendo entre los 10.700-10.600 puntos, que seguimos sin poder descartar. El objetivo de este escenario correctivo lo tenemos en los 10.000-9.800 puntos. El que pueda darse de nuevo va seguir bastante ligado a la situación europea.

Publicidad

El Eurostoxx 50 cerraba en los 2.288,05 puntos, perdía la referencia de los 2.330 puntos y se aproxima a la zona clave de los 2.270 puntos, que implican una nueva entrada otra vez el rango lateral. La sobrecompra acumulada en los osciladores de corto plazo apenas ha corregido, por tanto podemos continuar con los retrocesos, con el agravante de que en este último rebote no se ha conseguido superar los máximos anteriores y el freno ha vuelto a ser la zona de resistencia de los 2.400 puntos.

Publicidad

Dentro del rango lateral tenemos el nivel de los 2.200 puntos como soporte para no debilitar mucho más la situación. Si perdemos esta zona, volveremos a los mínimos iniciales del rebote, en torno los 2.100 puntos, con el riesgo de atacar la banda baja del canal y provocar la entrada a un escenario bajista. El nivel de soporte clave para este escenario lo tenemos en los 2.000 puntos, con una extensión hasta los 1.950 puntos. De perderse superaremos los mínimos de corrección de 2.009 por debajo de los 1.800 puntos.

Para anular este patrón, la única opción posible es la de superar la cota de los 2.400 puntos con un buen apoyo de volumen y de forma consistente para atacar el nivel de resistencia de los máximos anteriores en torno  a los 2.500 puntos con una extensión a la proyección de la media móvil de 200 sesiones en torno los 2.560 puntos. Si se logrará este objetivo podían proseguir los avances hasta los 2.700 puntos y se estaría confirmando el patrón de suelo. Pero el pesimismo reinante por la falta de decisiones en Europa no fuerza que éste sea el escenario más probable.

Publicidad

El Ibex35 cerraba en los 8.461,20 puntos, lastrado principalmente por el sector bancario.Nos quedamos dentro del rango que consideramos de máxima corrección para mantener el proceso de continuación que tenemos en su límite inferior sobre los 8.400 puntos, que no descartamos perder ya hoy en la apertura, aunque será importante ver en cierre semanal cómo queda la situación. Los osciladores de corto plazo están sesgándose de forma negativa. Especialmente visto el elevado volumen de negocio de las dos últimas jornadas de caídas y que han sido ya nuevamente con rangos considerables entre máximos y mínimos, con una acusada volatilidad.

Si perdemos la referencia de los 8.400 puntos, la siguiente zona de soporte la situamos en los 8.200 puntos, con opciones de extenderse a buscar otra vez los 8.000 puntos. En estas condiciones quedan amenazados los mínimos anuales que dan entrada a un escenario bajista que sigue estando presente. Los niveles clave los tenemos situados entre los 7.700-7.600 puntos con una posible extensión hasta los 7.500 puntos, que nos lleva el siguiente objetivo entre los 7..200-7000 puntos como parada previa y posible soporte antes de los mínimos 2009 sobre los 6.700 puntos. Para anular este escenario seguimos con las zonas clave que han actuado como resistencia primero los 8.800 puntos y luego hasta cerrar el hueco dejado a principios de noviembre en torno los 9.000 puntos.

Hasta que no se supere de forma consistente este nivel y podamos ver ataques hasta la zona de los 9.400-9.500 puntos mantenemos el riesgo de corrección a medio plazo de una forma elevada. Si se confirmara esta ruptura al alza del rango lateral que tiene como objetivo teórico la zona de los 9.800-10.000 puntos, sí que se anularía en estas opciones y daríamos lugar a un patrón de doble suelo que aún presenta un objetivo teórico más extendido hasta la zona de los 10.500 puntos. Este es el rango clave para entrar un escenario alcista que se ha visto nuevamente diluido y que no sería confirmado hasta que se superará con un fuerte volumen la zona de los 11.100 puntos, que por ahora se nos antoja un tanto improbable. Seguimos pendientes de la reunión europea pero otra vez con un elevado grado de escepticismo sobre el resultado de la misma.

En portada

Noticias de