Europa sigue en rango y Estados Unidos mantiene el leve tono positivo, pero sin despegar

Un paso para adelante y otro para atrás, intercambiando el signo de jornada. Es decir, técnicamente seguimos dentro de un rango lateral, en el que ni se pierden ni se superan niveles para tener mayores movimientos direccionales. Relejan la clara situación de las incertidumbres geopolíticas con múltiples frentes abiertos y las publicaciones de resultados, que se siguen decantando más por las superaciones de las previsiones. A veces, de forma testimonial, y no en todas sus líneas, como, por ejemplo, ayer Apple, que batía sus estimaciones de beneficios, pero quedaba por debajo de sus previsiones de incremento de ventas.

Situación agridulce, que tiene el reflejo en estos movimientos que, no por estar dentro de rango, dejan de tener su volatilidad. Y esta se hace algo más patente con el intercambio de signos, que si no acaba por producirse el resultado, prácticamente nos deja en los mismos niveles. Sólo el dólar, con la pérdida de los 1,3500, ha abierto las opciones de un movimiento direccional mayor. Los bonos siguen con rentabilidades muy bajas, actuando como refugio, según las noticias de los conflictos se agravan o no. 

La sesión de hoy sigue marcada por los mismos factores, muchos resultados y la evolución de la situación en Ucrania y en Gaza, así que el patrón puede ser muy similar al de jornadas anteriores. Veremos si en algún caso se superan niveles que puedan significar mayor direccionalidad.

El dólar marcó nuevos mínimos anuales (dólar más caro) al ceder, finalmente, la zona de los 1,3500, y nos abre la opción de buscar de mayores apreciaciones, buscando referencias en 1,3400-1,3300. Por el lado de las resistencias, sin cambios, débil la zona de los 1,3600, que se refuerza de forma más clara y queda como clave para invalidar la ruptura a la baja en los rebotes. El rango de la media móvil de 200 sesiones, sobre los 1,3676 y los 1,3700, como referencia importante para activar un proceso de mayor movimiento direccional.

El SP500 marcó nuevos máximos históricos intradiarios de forma testimonial y, al cierre, apenas ha quedado a un par de puntos de marcardos en una sesión de algo más de volumen, con los resultados a favor, volvió a tener un movimiento dentro del rango, que sigue manteniendo intacto el sesgo positivo, aunque por ahora con escasa fortaleza. Los osciladores de corto plazo han dado señales de giro alza de nuevo, desde la zona de lecturas de neutral, sin haber visitado la zona de sobreventa, y con algunas muestras de divergencias. El cierre fue con un avance del 0,50%, para acabar en los 1.983,53 puntos.

Superada de nuevo la zona de los 1.980 puntos, sigue pendiente de mostrar su consistencia, para asaltar a la cifra redonda de los 2.000 puntos, que suponía buscar un registro más acelerado dentro del movimiento actual, al romper esta rango lateral en el mes al alza. Se mantiene este como escenario más probable, con la continuación de los avances hasta estos niveles tras una consolidación más importante. Por ahora la prueba a la zona de soporte débil mantiene las expectativas de este escenario y que incluso viendo la zona de los 1.950 puntos aguantando mantendría las opciones inmediatas del impulso. Los resultados están permitiendo este comportamiento reduciendo el efecto negativo de las incertidumbres de las tensiones geopolíticas.

Los niveles de soporte continúan con la referencia débil sobre los 1.960-1.950 puntos, con la proyección de la última aceleración como apoyo, ya algo por encima de este nivel, más alto sobre los 1.955 puntos y después mantenemos la zona que tenemos como primer soporte, algo más relevante en los 1.920-1.900 puntos. Se refuerza el nivel anterior sobre los 1.880 puntos, con el apoyo ahora de la proyección de actual directriz de avance en este nivel. Después se mantiene el nivel de los 1.830-1.800 puntos, como soporte más relevante, también apoyándose con la proyección de la media móvil de 200 sesiones, que se coloca sobre 1.846 puntos. Luego están ya los 1.750-1.740 puntos, si se pierden estas referencias, se marca la entrada en rango lateral y quedaría en sesgo más negativo en la zona de los 1.700 puntos.

El siguiente nivel de soporte, en los 1.680-1.660 puntos, la extensión del mismo hasta 1.650 puntos, respetando el ajuste con los últimos mínimos significativos de octubre del pasado año, que es el que supondría amenazar también la continuidad del escenario lateral. Después tenemos la zona de soporte en los 1.600-1.580 puntos, que volverían a activar los escenarios de entrada, en posible corrección que no son nuestra apuesta, pero que significarían ir buscando niveles teóricos de retroceso, primero en la zona de los 1.500 puntos, y con posibles proyecciones, hasta la zona de los 1.400-1.370 puntos, si fuera con mayor intensidad. Por ahora, este escenario sigue contando con bajísima probabilidad de ocurrencia, y el sesgo es positivo a medio plazo, sólo perdiendo los 1.700 puntos comenzaría a poder contarse con él como opción.

El Ibex levantó el vuelo, como el resto de plazas de la eurozona, pero otra vez quedándose por debajo de la referencia que permita una ruptura del lateral, al alza, y presentar las opciones de un nuevo impulso que la ruptura, a la baja, y la continuación de los recortes, hasta los soportes más significativos. El avance fue con volumen, y apoyado en el sector bancario, animado por la operación del BBVA que el mercado entendió positiva, al quedarse Catalunya Caixa. Las opciones de tener un patrón de continuación no están aún anuladas, pero tiene posibilidad de, con un rebote de cierta envergadura, confirmar un nuevo impulso de avance, a validar niveles por la sobreventa, que se ha alcanzado en el corto plazo, consumiendo tanto tiempo como precio. Tiene que consolidar el cierre por encima de los 10.600 puntos, y atacar la zona de los 10.700-10750 puntos, para validar la opción del impulso. Cerró la sesión con un avance del 1,59%, para acabar en los 10.648,90 puntos.

Sin cambios en los 10.700-10.750 puntos, que son la primera referencia de resistencia para validar cualquier impulso que podamos tener ,sin haber perdido los soportes. Después quedaría la recuperación de la directriz de avance acelerada, perdida sobre los 10.900-10.850 puntos, que va confluyendo hacia el hueco dejado sobre los 11.085 puntos, cubierto, parcialmente, y actúa como primera resistencia clav,e a superarse y poder validar la aparición nuevos impulsos. Se queda pendiente de nuevo el ataque al rango proyectado en los 11.200-11.250 puntos, que ya no se han podido superar a la primera, porque son una confluencia importante de varios niveles de resistencia.

Si se logran romper de forma consistente, ya tenemos referencias en los 11.500 puntos para, finalmente, situarnos en la zona de los 11.800-12.000 puntos y aproximarnos al objetivo teórico marcado. Por ahora se han mantenido los soportes claves que nos respetan la vigencia de la figura de vuelta mayor y que nos deja como objetivo teórico, a medio plazo, la referencia de los 12.000-12.500 puntos, que seguimos sin descartar como posible opción antes del final del ejercicio.

Mantenemos como primera zona de referencia de soporte los mínimos de la semana pasada y la anterior, para delimitar las opciones del patrón de continuación, que serían perder los 10.450 puntos, de forma consistente, y que marca el retroceso hasta en siguiente rango, en los 10.250-10.000 puntos, dónde se proyecta la directriz de avance actual, sobre los 10.080 puntos. La media móvil de 200 sesiones, en los 10.205 puntos, moderando su pendiente, apoya el soporte de esta zona. Perder estas referencias comenzaría a complicar el panorama a corto plazo. Los soportes a vigilar, el primero en los 9.900-9.850 puntos de los mínimos anteriores. Después ya está la zona del hueco dejado sobre los 9.530 puntos, y para mantener sano el escenario a largo plazo, ha de aguantar en el rango de los 9.400-9.250, en caso de retrocesos importantes, sino ya nos volvemos a colocar dentro de un lateral.

Los 9.000 puntos quedan en zona de atracción por cifra redonda, pero sin relevancia técnica a priori, usando la extensión a la zona de los 8.800 puntos que, de perderse, son los que se encargarían de anular opciones impulsivas y nos marcaría un posible sesgo negativo dentro del lateral atacando los 8.200-8.000 puntos. Después tenemos referencias en los 7.700-7.500 puntos, que nos cambia el escenario a correctivo. Siguen las bajas probabilidades asignadas al escenario correctivo, que sólo comenzarán a incrementarse si se pierde la zona clave de los 9.500 punto,s de la que seguimos alejados, en tanto que un apoyo a los 10.000 puntos, aunque generaría dudas, podría sanear el avance acumulado.