El "Gordo" a los bancos europeos no consolidó los avances de las bolsas

El BCE cumplió con la barra libre de liquidez y soltó un auténtico "gordo" adelantado para las 523 entidades que acudieron a solicitar fondos por un importe de casi 500.000 millones de euros. Las bolsas lo tenían parcialmente descontado. Tras la noticia, reforzaban los avances que se producían durante la sesión y complementaban a los importantes de la jornada anterior.

Pero una vez más pudo la dicha bursátil de comprar con el rumor y vender con la noticia. Se desvanecía apenas minutos después el efecto de la subasta y empezaron los retrocesos para acabar finalmente en números rojos. Las dudas sobre si la liquidez efectiva va a llegar a la economía ganaron terreno, se desconfía que los recursos finales obtenidos por los bancos a bajo coste no vayan a servir sólo para engrosar o tapar sus agujeros momentáneamente.

O si con la medida se lograría estabilizar definitivamente el mercado de deuda europeo, tras la visible mejora de las primas de riesgo. Desde luego el posible QE encubierto europeo no ha tenido tanto impacto como los oficiales americanos. El dólar lo corroboraba tras buscar a la zona de los 1,3200 de una forma puntual volvía a atacar la zona de soporte de los 1,3000 que se mantuvieron. Se ponía freno sin superar las zonas clave de confirmación al temprano inicio del esperado rally de Navidad. Veremos si fue una consolidación por los avances anteriores y aún se guarda empuje o sólo un espejismo. Las mejoras en los osciladores de corto plazo en cuanto a momento aún se han de confirmar, al igual que las pautas en los precios para que podamos confirmar la pauta estadística de final de ejercicio.

Las bolsas americanas también se arrugaban ante el comportamiento europeo, pero finalmente salvaron por poco los muebles y presentan mejores expectativas técnicas que sus homónimas europeas. Para la sesión de hoy los datos macroeconómicos pesarán para despejar dudas, tras quedar un poco en tierra de nadie entre los niveles que confirman las distintas opciones direccionales que tenemos para el corto plazo.

El SP500 cerraba tímidamente al alza en los 1.243,72 puntos, tras haberse apoyado los mínimos de la sesión la primera zona de soporte en torno los 1.230 puntos. Logró mantener el momento positivo en los osciladores de corto plazo consiguiendo que aún aboguen por la continuidad del movimiento de avance, pero a falta de nuevas confirmaciones que tendrán que producirse en la sesión de hoy vía precio. Sigue pendiente la superación de las distintas resistencias que presenta el rango comprendido entre los 1.250 puntos y los 1.300 puntos.

La primera la directriz bajista secundaria que se proyecta por los distintos máximos situada en los 1.255 puntos, después la media móvil de 200 sesiones que actuado como referencia importante en todos los avances frenándolos y que se sitúa sobre los 1.260 puntos. Le siguen después los máximos anteriores en los 1.265 puntos, 1.275 puntos y finalmente la línea clavicular sobre los 1.280 puntos y por último la zona de máximos entre los 1.290 puntos y los 1.300 puntos.

Como vemos muchos niveles importantes concentrados en poco espacio de ahí la dificultad de que puedan superarse con facilidad. Pero, por otro lado, si lo consigue de forma clara y con un buen apoyo de volumen extendería la subida hasta los máximos anuales entre los 1.350-1.370 puntos dando opciones para entrar un escenario de avance a medio plazo que proyecta el siguiente objetivo la zona de los 1.450 puntos.

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Si no resiste la presión de la superación de estas resistencias tocará vigilar los niveles de soporte, el primer rango entre los 1.230 puntos y los 1.210 puntos que es la banda donde situamos la salida del rango lateral, que puede extenderse hasta la proyección de la directriz de avance ajustada con los mínimos del mes de octubre y noviembre y que se proyecta ahora sobre los 1.200 puntos. Perder esta referencia nos volvería situar dentro del rango lateral, con opciones otra vez a buscar la base del mismo con otro soporte previo en la zona de los 1.160 puntos antes de los niveles clave que tenemos en los 1.110-1.100 puntos.

Esta referencia extendida hasta los mínimos anuales es la que nos marca la entrada un escenario bajista, que seguimos sin poder descartar y que nos llevaría objetivos situados en los 1.000-980 puntos si se confirmara, con opciones de mayores extensiones. Para anular las opciones este escenario, la clave continúa la superación de la zona de resistencia de los 1.300 puntos.

El Ibex35 cerró ayer en los 8.378,4 puntos. Un recorte significativo si lo contemplamos desde los máximos en los que se frenaba, justo la zona de resistencia de los 8.600 puntos, que marcábamos como clave para dar continuidad a los rebotes. Es importante que la sesión de hoy consiga un cierre positivo y a ser posible por encima de los 8.450 puntos para mantener las expectativas de rebote. Si supera la zona de resistencia de los 8.600 puntos, quedará abierto el camino para atacar la zona de techos del lateral que situamos en los 8.800 puntos, y que consideramos clave a corto plazo para poder prolongar los avances.

Se considera superado el techo del lateral, si cierra el hueco dejado el mes de noviembre que se extiende hasta la zona de los 9.000 puntos con opciones de buscar entonces los máximos anteriores sobre los 9.400 puntos. Esta zona de resistencia se refuerza ahora también con la proyección de la media móvil de 200 sesiones sobre los 9.350 puntos. El objetivo de la salida al alza del rango lateral lo tenemos situado los 9.800-10.000 puntos, pero si consigue superar la zona de los 9.400 en puntos se habrá dejado además un patrón de doble mínimo que extiende los avances hasta la zona de los 10.500-11.100 puntos, que es un importante nivel para marcar un cambio de escenario al alza a medio plazo si consigue superarse con un buen apoyo de volumen.

Este escenario aunque aún tiene muy pocas probabilidades de ocurrir hay que tenerlo previsto. Si ahora falla la superación de estas resistencias de corto plazo pasamos a vigilar las zonas de soporte. Cierres por debajo de los 8.200 puntos descartarían la continuidad de cualquier rebote y amenazan con atacar la psicológica zona de los 8.000 puntos y volver a poner en perspectiva a la zona de mínimos el rango lateral que es importante porque nos delimita la entrada en un escenario bajista medio plazo.

Esta zona de mínimos la tenemos entre los 7.700-7.600 puntos. Su pérdida nos deja un primer objetivo la zona de los 7.200-7.000 puntos con la extensión más que probable a la búsqueda de los mínimos de 2009 sobre los 6.700 puntos. Este escenario, que seguimos no desaparecerá hasta que no se consiga el objetivo de una superación al alza del rango lateral y que tenemos marcado sobre los 9.800 puntos.

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