Cómo protegerse de los riesgos que vienen

Durante los próximos meses se agolpan citas políticas que amenazan la estabilidad en los mercados. La prudencia es el consejo generalizado para abordar cada uno de estos eventos, aunque los expertos suelen incidir en las oportunidades que se abren

Los mercados se enfrentan a amenazas de bajo crecimiento y a la posibilidad de que la política monetaria ya no sirva para reactivarlo. Al menos, estas cuestiones son medibles empíricamente: van publicándose datos, éstos se van agregando, van dibujando curvas y tendencias y puede llegar un día en que los inversores sepan a qué atenerse.

Hay otro tipo de riesgos más incontrolables porque tienen que ver con la política, es decir, con las decisiones que tomen los electores y con las que a continuación, o antes, para protegerse, adopte el dinero. En las próximas semanas hay algunas de estas citas: el referéndum por la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, el 23 de junio, y las elecciones en España, el 26. Un poco más avanzado el año, veremos cómo cotiza que las bases republicanas hayan escogido a Donald Trump como candidato.

 Hay otro tipo de riesgos políticos que no tienen que ver con la democracia entendida como toma de decisiones por parte de los ciudadanos, sino con procesos de las élites políticas que pueden provocar movimientos en los mercados: en Brasil hay un proceso para acabar con la presidencia de Dilma Rousseff y con el legado del Partido de los Trabajadores, mientras que en Europa, las autoridades parecen estar de acuerdo en que hay que negociar con Grecia una reestructuración de su deuda a lo largo de los próximos meses. 

¿Cómo cotiza cada una de estas cuestiones en los mercados?, ¿hasta qué punto son un riesgo?

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