El presunto asesino de su mujer en la A-5 pasa a disposición judicial
Salustiano Amador Muñoz, el presunto asesino de su mujer, Dolores Vargas Silva (41 años), ha pasado a primera hora de[…]
Salustiano Amador Muñoz, el presunto asesino de su mujer, Dolores Vargas Silva (41 años), ha pasado a primera hora de este martes a disposición judicial. El acusado llegó tapado con una capucha en un furgón que estaba custodiado por dos vehículos y al que le esperaba un fuerte cordón de seguridad para evitar cualquier incidente.
Seguramente antes de partir hacia los juzgados Amador desayunó un café con magdalenas, el típico desayuno que se les da a los detenidos en la comandancia de Toledo. Llegó exactamente a las 9.03 horas de este martes para pasar a disposición judicial del juzgado de instrucción número 1 de Torrijos (Toledo), el cual se encarga de llevar los casos de violencia de género.
Un furgón de la Guardia Civil advertía de su llegada. Escoltándolo dos coches patrulla al que también le esperaba en la calle un fuerte cordón de seguridad con más de una docena de agentes. Aunque los agentes de la Benemérita no tuvieron que actuar, pues en el juzgado no se presentó ningún familiar ni de Amador ni su víctima, Dolores Vargas Silva.
También como medidas de seguridad se colocaron vallas a lo largo de la fachada de la sede judicial para evitar que los curiosos se acercasen al detenido, que hoy rendirá cuentas por los hechos que se le imputan ante la justicia: un delito de homicidio doloso, una tentativa de homicidio y un delito de lesiones sobre la hermana de Dolores.
Lo defenderá Eduardo Alarcón, que ante los medios ha expuesto este martes que su cliente no recuerda los hechos, que no era consciente. Así piensan eludir la máxima pena.
Alarcón ha afirmado que su cliente se encuentra «bien, afronta la situación porque sabe lo que tiene por encima». De igual modo ha explicado que la intención de su cliente era entregarse este lunes, así lo habían hablado con la familia con la que estuvieron en contacto durante su huida.
«Le dijimos a la madre que era conveniente que se entregara», ha explicado el abogado de Amador, que aunque en un primer momento dijo desconocer que su defendido se escondiera en Sevilla. Y es que hay que precisar de que no cuadraría con la defensa de Amador que se dijese que las drogas y los presuntos problemas psicológicos le hicieran desconocer la situación pero sin embargo estuviese escondido en Sevilla. A unos 600 kilómetros de donde se cometió el crimen que se le imputa.