El presunto asesino de la A-5 quiso matar a un familiar en 2012
En enero de 2017 Salustiano Amador Muñoz, el presunto autor de la muerte de su pareja en la A-5 el[…]
En enero de 2017 Salustiano Amador Muñoz, el presunto autor de la muerte de su pareja en la A-5 el pasado sábado, no regresó a la prisión de Navalcarnero (Madrid) tras un permiso carcelario. Allí estaba cumpliendo una condena de 8 años por el intento de homicidio de José Rufino, un primo hermano de su mujer, Dolores Vargas, la madrugada del 27 de mayo de 2012.
Los hechos ocurrieron sobre las 2.15 en la zona de ocio de La Cubierta de Leganés, tras una celebración familiar por la primera comunión de una niña. Amador se paseaba por el recinto con una pistola de la marca Walter que llevaba a la vista entre su pantalón y la cintura. Al encontrarse con José, Amador sacó el arma, le disparó de frente y no le alcanzó. Sin embargo, los dos tiros siguientes impactaron en José cuando éste se encontraba de espaldas y trataba de huir, al tiempo que Amador le decía: «¡Te voy a matar!», según la sentencia judicial. Un proyectil le hirió en la zona lumbar y otro en un glúteo.
Inmediatamente, Amador intentó evadirse, pero fue interceptado por agentes de la Policía, a los que también apuntó con la pistola. Los funcionarios lograron reducirlo. A los dos días ingresó en la cárcel de Alcalá-Meco, también en Madrid. Estuvo en prisión provisional hasta que fue condenado, el 10 de julio de 2013, a cinco años de cárcel por el intento de homicidio de José, dos más por la tenencia ilícita de armas y otro año por el atentado a los policías.
Amador fue trasladado a la prisión de Navalcarnero, a la que no ha regresado desde 2017 aprovechando un permiso. Con documentación falsa, pues estaba en busca y captura, llegó a ocultarse un tiempo en las Tres Mil Viviendas de Sevilla, donde él y su familia tienen varios pisos y donde el fugitivo se encuentra desde el sábado, después de matar presuntamente a Dolores atropellándola varias veces.
