El empresario denunciado por Teresa Rodríguez dimite en la Cámara
El incidente protagonizado por el empresario Manuel Muñoz y la dirigente de Podemos Teresa Rodríguez ha llevado a la dimisión[…]
El incidente protagonizado por el empresario Manuel Muñoz y la dirigente de Podemos Teresa Rodríguez ha llevado a la dimisión del primero de sus cargos en la Cámara de Comercio. Rodríguez hizo público este viernes que Muñoz se había avalanzado sobre ella y tapado la boca con la mano para darle un beso «fingido».
Con la denuncia pública y con la judicial, todos los focos estaban sobre el empresario, quien ayer declaró a ABC de Sevilla que estaba bebido y que se arrepentía de su actuación, por la que se disculpaba ante Teresa Rodríguez. Además, según fuentes cercanas a la Cámara de Comercio, Muñoz, de 72 años, estaría atravesando un «delicado momento personal». Sin que esto sea descargo por sus acciones, desde la Cámara quieren dejar claro su rechazo por la actitud de Manuel Muñoz y condenan este tipo de comportamientos.
Además, desde la institución que dirige Francisco Herrero aseguran que durante varios días han intentado ponerse en contacto con Teresa Rodríguez para disculparse por los hechos ocurridos en su sede de Sevilla, sin lograrlo. Finalmente mandaron un escrito al Parlamento para dejar constancia de su postura de rechazo total ante lo acontecido.
Cabe recordar que, según el relato de Teresa Rodríguez -y como ha reconocido Manuel Muñoz-, la dirigente de Podemos se marchaba de la Cámara cuando «me salen al paso dos hombres que venían de la sala donde estaba la reunión anteriormente citada. Con una actitud abiertamente distendida e informal, el primero de ellos me saluda y me da dos besos. Es entonces cuando el Sr. Muñoz Medina directamente se abalanza sobre mí y con un empujón me amordaza la boca con la mano mientras aproxima su boca a la mía y simula besarme en los labios con su mano de por medio».
Por su parte, el responsable de la empresa de decoración Guadarte relata que estaba en la primera planta de la Cámara de Comercio de Sevilla, donde «acabamos de tomar unas copas» cuando se topó con Teresa Rodríguez y el presidente de la institución cameral, Francisco Herrero. «Con 35 años de trayectoria empresarial, me avergüenzo de lo que ha pasado», afirma. Reconoce que actuó según el relato de Rodríguez, y, según ha declarado, pide perdón por sus actos.