Parada la planta TMB de Bilbao tras un caso de legionella en la plantilla
La planta de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) de residuos de Bilbao lleva a cabo hoy una parada por razones técnicas[…]
La planta de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) de residuos de Bilbao lleva a cabo hoy una parada por razones técnicas tras un caso de legionella detectado en la plantilla hace unas semanas y dar positivo en esa bacteria el posterior análisis de muestras de agua tomadas de las duchas de la instalación.
Según fuentes de la Diputación Foral de Bizkaia, la parada no tiene nada que ver ni con el tipo de residuos que se han manipulado en la planta ni con las condiciones de la misma, sino que está motivada por la clausura de las duchas y se mantendrá hasta que la empresa instale unas duchas portátiles para propiciar la aplicación del pertinente tratamiento de desinfección en las tuberías.
Por su parte, fuentes de ELA han indicado que la parada no afecta a la totalidad de la producción de la planta, lo que "pone en riesgo" a la plantilla afectada.
El sindicato ha precisado que el instituto de salud y seguridad laborales Osalan informó el pasado 7 de febrero de que un trabajador estaba ingresado en un centro hospitalario tras dar positivo en legionella el 28 de enero.
Posteriormente, Osalan, en una reunión, con la dirección, los sindicatos y la empresa encargada de la desinfección (Biotik) informó de que el resultado de las analíticas de agua de las muestras tomadas en las duchas fue positivo en legionella.
Según ELA, la empresa "ocultó" dicho resultado a los delegados de prevención ya que la dirección de la empresa había sido informada de ello días antes.
Osalan volvió a reunir ayer a la dirección, a los sindicatos y a Biotik para comunicarles que por segunda vez el resultado ha sido positivo en legionella en cinco muestras de agua caliente tomadas el pasado 25 de febrero, según el sindicato.
Ante ello, la dirección ha procedido a parar la producción en la planta tras prohibir Osalan el uso de las duchas, salvo en los casos de "báscula" y "peones de descarga", según ELA, que ha considerado que esta última decisión "pone en gravísimo riesgo la salud de los trabajadores afectados".
Para la central, la dirección de TMB, dependiente de la sociedad foral Garbiker, "pone por encima de la salud de la plantilla sus intereses, no parando la totalidad de la producción".
El sindicato ha denunciado en varias ocasiones ante Osalan, la Inspección de Trabajo y Garbiker "el lamentable estado de las instalaciones, la falta de mantenimiento y la falta de seriedad en la salud laboral".
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