El Gobierno Vasco no creará un complemento para las pensiones bajas

El Parlamento Vasco ha rechazado hoy tramitar la proposición de ley de EH Bildu que proponía que el Gobierno autonómico creara un sistema de complemento de las pensiones de jubilación bajas.

Ningún grupo de la Cámara, excepto el proponente, ha apoyado que el Parlamento entre a debatir esta iniciativa que buscaba un complemento a las personas que reciben una pensión que "no les garantice unas condiciones de vida dignas".

En la proposición de ley se establecía que se complementaran las pensiones hasta alcanzar los 1.080 euros, lo que supone el 60 por ciento del salario neto medio de la Comunidad Autónoma Vasca. A esa cantidad se llegaría en cuatro años, momento en el que se beneficiarían, según el grupo proponente, 160.000 jubilados.

PNV, PP y UPyD han votado en contra y el PSE-EE se ha abstenido. El Gobierno Vasco ya mostró su criterio desfavorable a la toma en consideración de esta propuesta porque, a su juicio, "carece de la necesaria seguridad jurídica porque vulneraría las normas de compatibilidad en la percepción de prestaciones de Seguridad Social".

Eva Blanco (EH Bildu) ha dicho que esta propuesta plantea una solución "viable y posible", pero "transitoria" hasta que en Euskadi haya un sistema de pensiones propio.

Blanco ha hablado de una gestión "nefasta" del sistema de la Seguridad Social, que ha hecho que las pensiones se hayan visto reducidas en los últimos años un 35 por ciento.

Josune Gorospe (PNV) ha calificado la iniciativa de "propaganda dura" y de "populismo", porque no tiene ningún "rigor jurídico ni financiero" ni presenta el impacto que tendría en los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma.

Gorospe ha recordado que el Gobierno Vasco tiene establecido desde hace años un complemento de las pensiones de viudedad del que se benefician unas 20.000 personas y ha criticado que como "triste consecuencia" de la reforma del PP del sistema, las pensiones se van a ir reduciendo un 5 por ciento por década.

Laura Garrido (PP) ha hablado de la inconstitucionalidad de la propuesta y ha criticado que su fin último sea un sistema propio de pensiones cuando Euskadi es "deficitario".

Ha recordado que al cierre de 2015, los ingresos por pensiones contributivas de los trabajadores vascos alcanzaron los 5.852 millones de euros, mientras que el gasto superó los 8.300 millones. Esto supuso un déficit de 2.450 millones de euros, que se estima crecerá en unos 300 o 400 millones este ejercicio.

Gorka Maneiro (UPyD) también ha opinado que un sistema propio "arruinaría" al País Vasco y ha apostado por caminar hacia una seguridad social europea.

Maneiro ha dicho que es "enormemente positivo que sea único el sistema de pensiones", porque es "más seguro cuanto más grande sea" y ha propuesto que se mejoren todas las pensiones en el conjunto de España en lugar de "fomentar la desigualdad dentro del Estado".

José Antonio Pastor (PSE-EE) ha explicado que su grupo se ha abstenido porque considera necesario un debate sobre esta materia, pero no en los términos de "voluntarismo" y de "falta de rigor" que a su juicio planeta la iniciativa de EH Bildu.

Pastor ha argumentado que la solución al sistema es que haya salarios dignos que garanticen las cotizaciones suficientes y no la adopción de "medidas asistenciales".

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