El ahorro en depósitos de las familias acelera su subida en vertical

Los depósitos de las familias baten un nuevo récord y aumentan en 50.000 millones en julio a pesar de su mínima rentabilidad

Las familias siguen confiando en los depósitos para colocar su dinero pese a que la rentabilidad que reciben por ellos ronda el cero por ciento debido a los bajos tipos de interés.

Así, en julio, el ahorro en depósitos de los hogares ha vuelto a marcar un nuevo récord al incrementarse un 5,6% respecto al mismo mes del año anterior, lo que suponen 50.000 millones más. Ya se sitúan en 942.800 millones de euros, la cifra más alta desde que se tienen registros.

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La subida en julio ha sorprendido a los analistas, ya que se trata de un mes en que los depósitos tienden a la baja debido a los gastos ocasionados por las vacaciones, a la liquidación que realizan los autónomos del segundo trimestre y al pago del primer plazo de la declaración de la renta.

Máximos impulsados por la pandemia

Los depósitos son uno de los productos de ahorro favoritos de las familias, que prefieren asumir menor rentabilidad a cambio de mayor seguridad, y desde que estalló la pandemia del coronavirus su crecimiento en vertical no ha cesado.

Su remontada se ha debido al incremento del ahorro en los hogares. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, los hogares españoles situaron en 2020 su tasa de ahorro en el 14,8% de su renta disponible, una tasa 8,5 puntos superior a la de 2019 y la más alta de toda la serie histórica iniciada en 1999.

Las familias españolas, afectadas por las limitaciones de movilidad y el confinamiento domiciliario, ahorraron el año pasado 108.844 millones de euros hasta alcanzar los 739.585 millones.

Las empresas se decantan por los depósitos

Las familias no son las únicas que optan por los depósitos. Las empresas también se decantan por ellos y en julio se incrementaron un 2,3% respecto al mismo periodo del año pasado, hasta alcanza los 294.900 millones de euros.

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Pero cayeron un 2% respecto a los 300.800 millones de junio debido a la necesidad de liquidez de muchas compañías originada por las restricciones de actividad.

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