Alcázar, de los "8 de Airbus", dice que pedirían amnistía si son condenados

El expresidente del Comité Interempresas de Airbus, José Alcázar, ha dicho hoy que ser sindicalistas es el "único delito" que han cometido él y los otros siete encausados por los altercados con policía y trabajadores durante la huelga general de 2010, y ha avanzado que de ser condenados pedirán la amnistía.

Alcázar ha hecho estas declaraciones en una comparecencia junto a representantes de Podemos, que han presentado una proposición no de ley para la derogación del artículo 315.3 del Código Penal, que establece penas de hasta tres años de prisión para quienes "coaccionen a otras personas a iniciar o continuar una huelga".

Alcázar ha agradecido esta iniciativa a la formación morada no solo por "los ocho de Airbus", sino por los 300 sindicalistas que en la actualidad se enfrentan a procesos judiciales por el mismo motivo.

Alcázar ha confiado en que la justicia les ampare y ha asegurado que el juicio al que se enfrentan mañana constituye "algo insólito en la democracia".

El secretario de Relaciones con la Sociedad Civil de Podemos, Rafael Mayoral, ha afirmado que el artículo 315.3 del Código Penal es una "rémora" que persiste en el ordenamiento jurídico y ha destacado que hasta ahora no había sido utilizada con el "salvajismo" con que se ha hecho en el caso de los sindicalistas de Airbus.

Además, ha ligado este asunto con el de los titiriteros encarcelados en Madrid acusados de enaltecimiento de terrorismo y ha advertido de que "jurídicamente lo que está ocurriendo es inaceptable", ya que considera que usar la prisión preventiva para delitos de opinión es "absolutamente aberrante".

La portavoz de En Comú Podem en la Comisión de Empleo del Congreso Aina Vidal ha dicho que el hecho de que hoy en día haya personas "ejemplares" encausadas por la defensa de sus derechos y los de sus compañeros es una "barbaridad".

La diputada de En Marea Yolanda Díaz ha mostrado su solidaridad con los cerca de 300 trabajadores que están siendo "víctimas de una represión brutal", y ha alertado de que el caso de Airbus es un ataque a la clase trabajadora, los sindicatos y de que se está poniendo en cuestión el derecho en trabajo.