Terrinches (Ciudad Real) va a permitir celebrar bodas en su castillo medieval

El Ayuntamiento de Terrinches (Ciudad Real) aprobará una ordenanza que permitirá celebrar bodas civiles en bienes de titularidad municipal, principalmente en el castillo medieval de la localidad de modo que puede ser un reclamo turístico para luchar contra la despoblación.

Además, promoverá especialmente la celebración de bodas medievales, aunque no se limitará a esta temática, según ha informado el Consistorio en nota de prensa.

El objetivo de la ordenanza es convertir al castillo, catalogado como Bien de Interés Cultural y que alberga el Centro de Interpretación de la Orden de Santiago en el Campo de Montiel, en un "aliciente más para el municipio" y, aunque es una medida "débil y flexible" no es la única en la que trabaja el Consistorio para frenar la despoblación, ha señalado el alcalde de Terrinches, Nicasio Peláez.

La iniciativa está enmarcada dentro del plan de valores de Terrinches con la organización Economía Humana, que se autodefine como un "ecosistema de emprendimiento e innovación social basado en la inteligencia colaborativa que crea condiciones para una economía más coherente, próspera y humana".

Peláez ha señalado que el Ayuntamiento lanzará la aprobación inicial de la ordenanza y, una vez permanezca expuesta al público durante un mes y siempre que no haya alegaciones, se hará la exposición definitiva "y se podrán realizar ese tipo de actos".

La celebración de las bodas en el castillo tendrá un coste de 50 euros para los empadronados o nacidos en la localidad y de 100 euros para el resto, cantidades a las que habrá que sumar una fianza de 50 euros que será reembolsada si no se producen desperfectos.

El castillo Aben Yucef fue construido en el siglo XIII y durante los siglos XIX y XX se utilizó como bodega y casa de labor.

De él se conserva la torre de homenaje y parte de sus antemurallas y torreones esquineros, ha explicado el Ayuntamiento que ha recordado que fue restaurado recientemente, después de que lo comprara en 2005.

La torre se eleva sobre el pueblo a 950 metros de altitud y ofrece una de las mejores vistas de la localidad, así como del paraje de San Isidro y su entorno, por lo que tanto el decorado del interior la convierten en un escenario ideal para celebrar bodas temáticas acordes a la época de la construcción del castillo. EFE

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