Indra ganó 21,2 millones de euros en el primer trimestre, un 76,7 % más
La compañía tecnológica Indra obtuvo un beneficio neto en el primer trimestre del año de 21,2 millones de euros, un[…]
La compañía tecnológica Indra obtuvo un beneficio neto en el primer trimestre del año de 21,2 millones de euros, un 76,7 % más que en el mismo periodo de 2016, en que ganó 12 millones, apoyada en el crecimiento en ventas en Europa y España, y en el de las áreas de defensa y servicios financieros
Los ingresos ascendieron a 638 millones de euros, un 2 % más que en los tres primeros meses de 2016, aunque en moneda local registraron un descenso del 1 %, según ha informado hoy la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El resultado bruto de explotación (ebitda) cayó un 10 % respecto al primer trimestre de 2017 y ascendió a 48 millones de euros.
Europa y España fueron las dos regiones donde más crecieron las ventas, con incrementos del 16 % y del 5 %, respectivamente, mientras que los negocios en que más aumentaron fueron defensa y seguridad, un 11 % más que en el primer trimestre de 2017, y servicios financieros, con un 5 %.
El mayor descenso lo registró el segmento de T&D (transporte y defensa), con una disminución de las ventas del 1 %.
La contratación bajó un 7 % por la estacionalidad del negocio de elecciones y por la pérdida del contrato de externalización con Vodafone.
Los otros ingresos, integrados principalmente por la capitalización de gastos de I D y subvenciones, ascendieron a 9,3 millones de euros, 400.000 euros más que en el primer trimestre de 2016.
La generación de caja en el trimestre fue de -5 millones de euros, un resultado que Indra considera bueno dado el elevado volumen de cobros (cerca de 80 millones de euros) que estaban estimados para los primeros meses del año y que se adelantaron al cuarto trimestre de 2016.
Los aprovisionamientos y otros gastos de explotación subieron un 2%, hasta los 269,4 millones de euros, y los gastos de personal se mantuvieron en 331 millones de euros, prácticamente igual que en el primer trimestre de 2016.
Indra ha explicado que los menores gastos asociados al descenso del 7% de la plantilla media en el período han sido compensados por el impacto de los tipos de cambio, la inflación salarial y la periodificación de las provisiones de personal a realizar en 2017.
Al cierre del primer trimestre de 2017, la plantilla final de Indra estaba formada por 33.058 empleados, un 8 % menos que en el primer trimestre de 2016 por el plan de reducción que aplicó la compañía.
La deuda neta se incrementó en un 9,1 % y alcanzó los 531,9 millones de euros, mientras que el nivel de apalancamiento se redujo hasta 2,3 veces el ebitda y el coste medio de la deuda un 2,4 %.