Isolux y sus acreedores analizarán esta semana plan de viabilidad
La Dirección de Isolux y sus principales accionistas (banca y bonistas), verán esta semana el plan elaborado por Álvarez &[…]
La Dirección de Isolux y sus principales accionistas (banca y bonistas), verán esta semana el plan elaborado por Álvarez & Marsal para asegurar la viabilidad de la ingeniería, que en abril presentó preconcurso de acreedores para ganar tiempo y evitar su quiebra.
En el caso de contar con el apoyo de los accionistas, el plan será elevado el viernes al consejo de administración, que, además, formulará la cuentas correspondientes a 2016 y que quedaron pendientes a la espera de la aprobación de un plan de viabilidad para Isolux y que fue encargado a Álvarez y Marsal, han informado hoy a Efe fuentes cercanas al grupo.
Una vez presentadas las cuentas, la firma contará con un plazo de 30 días para convocar la Junta General de Accionistas para su ratificación, según explican en una nota informativa representantes de los sindicatos, que el lunes se reunieron con el presidente de Isolux, Nemesio Fernández-Cuesta.
En marzo, la compañía aplazó la presentación de sus cuentas de 2016 y acordó solicitar el preconcurso de acreedores después de que la banca no lograra ponerse de acuerdo para dotarla de una nueva inyección de liquidez (de entre 200 y 300 millones) para afrontar gastos corporativos y reactivar proyectos.
Durante semanas de negociaciones, Caixabank y Bankia, acreedores y accionistas de Isolux, intentaron sin éxito que Santander, que en medio de las negociaciones vendió la deuda y las acciones que mantenía en la ingeniería, se sumara a su intención de dotar de nuevos fondos a la compañía.
Al acogerse a preconcurso, Isolux, cuya deuda financiera neta ascendía a unos 1.000 millones a cierre de 2016, disponía de un plazo de tres meses prorrogable por otro más para intentar alcanzar un acuerdo que garantice su viabilidad antes de entrar en concurso de acreedores (antigua quiebra).
Según los sindicatos, la dirección de la ingeniería pretende agotar la duración del preconcurso, que finaliza el día 5 de julio, y seguir trabajando hasta entonces "en la búsqueda de un socio inversor o comprador".
Añaden que el plan de viabilidad consiste en determinar cuáles son los proyectos que necesitan caja y va a ser o no financiados por los bancos para evitar la ejecución de avales y cuáles se pueden mantener sin financiación bancaria.
Según publica hoy El Economista, deben mantenerse los ubicados en Argentina, varios de los que desarrolla en España, el complejo solar Kayenta (Arizona, Estados Unidos), y algunas obras en África y países del Este de Europa.
En julio de 2016, Isolux acordó con sus acreedores un plan para su reestructuración por valor de más de 2.000 millones.
Dicho acuerdo reestructuró la deuda en tres tramos, uno de 200 millones de dinero "nuevo" para dotarla de liquidez hasta 2017; otro de 550 millones (ampliable a 750) de deuda sostenible, y otro de 1.400 millones de deuda irrecuperable y convertible en acciones por parte de los acreedores.
En diciembre, los bonistas (que suman el 41,8 %) y la banca se convirtieron en los principales accionistas de Isolux, encabezados por Caxibank (que ahora tiene el 10,6 %), Santander y Bankia. Los anteriores accionistas diluyeron su participación al 5,43 %.