Armadores europeos alertan de impacto económico de cerrar 30% áreas pesqueras

La Asociación Europea de Armadores (Europêche) subrayó hoy que cerrar el 30 % de las áreas marinas a actividades de[…]

La Asociación Europea de Armadores (Europêche) subrayó hoy que cerrar el 30 % de las áreas marinas a actividades de extracción de aquí a 2030 tendría un alto impacto socioeconómico en las áreas costeras, en las actividades de pesca local sostenible y en la seguridad alimentaria.

Europêche rebate así la decisión de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, en sus siglas en inglés) que, en su último congreso en Hawai, adoptó una serie de recomendaciones no vinculantes destinadas a los Gobiernos, la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Unión Europea (UE).

En esas recomendaciones que Europêche ha hecho públicas en un comunicado, el IUCN -formado por ministros de Medio Ambiente de los países y las ONG- propone que se cierre a la extracción pesquera un 30 % de las áreas marinas de aquí a 2030.

Los armadores europeos argumentan que esta cuota "no tienen en cuenta impactos como los de la polución" y que "no están basadas en un amplio consenso de la comunidad científica", mientras que "algunos científicos (...) afirman que ese cierre no traería beneficios para la biodiversidad".

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El presidente de Europêche, Javier Garat, afirmó que las Áreas Marinas Protegidas (MPA) "son una herramienta, no un objetivo", por lo que "para que su cierre sea exitoso, hace falta que esté justificado".

Aunque para muchos científicos las áreas protegidas son "una solución para la sobreexplotación de poblaciones de peces", añadió, al tiempo que insistió en que "tenemos que preguntarnos qué estamos protegiendo y por qué".

"Las MPA deben estar basadas en criterios científicos, bien supervisados, efectivos y no establecidos para alcanzar una cuota", añadió.

Destacó que "las especies marinas no respetan fronteras" y que "muchas MPA actualmente fallan porque su planificación no está integrada en la del espacio marino".

Las medidas propuestas por el IUCN, según Garat, "amenazan a las comunidades locales, dado que los pescadores no podrían llevar a cabo sus actividades sostenibles en esas áreas".

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