La cúpula de Pharmamar llena sus arcas personales con 167 millones de euros gracias a la revalorización del valor en bolsa y el pago de dividendo provocado por la confianza en el Aplidin y la lurbinectedina
Abengoa consigue convencer a los acreedores para que no se levanten de la negociación mientras la CNMV espera los resultados de la compañía que debía presentar este martes