Rato: «He sido treinta años político y jamás me han acusado de nada»

Era una de las comparecencias más esperadas y no ha defraudado. Rodrigo Rato, expresidente de Bankia, del FMI y exministro[…]

Era una de las comparecencias más esperadas y no ha defraudado. Rodrigo Rato, expresidente de Bankia, del FMI y exministro de Economía durante el Gobierno de José María Aznar ha acudido a la comisión del Congreso de los diputados que investiga la crisis financiera para explicar su gestión tanto en el que ahora es el mayor banco público del país, como influyente figura del mundo económico tanto nacional como internacional.

Tras defender su gestión tanto al frente del ministerio como en el FMI y Bankia, Rato ha protagonizado un airado rifirrafe con la diputada de ERC Ester Capella a la que ha contestado diciendo que "he sido treinta años político y jamás me han acusado de nada". Rato ha respondido así a los reproches de Capella por su gestión económica y financiera y ha afirmado, subiendo la tensión de la sala, que: "no le permito que me acuse de nada. Usted me acusa porque allí sentada está protegida. No sé si eso es un delito penalmente pero desde luego moralmente lo es".

Además, Rato ha defendido su gestión al frente de Bakia y ha asegurado que todas las decisiones que se tomaron, desde la fusión fría de Caja Madrid con otras cinco cajas y posteriormente con Bancaja hasta la salida a Bolsa no sólo contaron con el respaldo del Banco de España sino que estuvieron motivadas por la propia institución.

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"En julio de 2010 el Gobierno español modifico la ley de cajas e impulsó los llamados SIPS o fusiones frías. Estos fueron diseñados, decididos e impulsados por el Banco de España. En Caja Madrid, por indicacion del Banco de España tomamos contacto con otras cinco cajas. Posteriormente, el Banco de España me llamó de urgencia a mi personalmente y al presidente de Bancaja para que avanzaramos en la fusión. De ese despacho se nos trasladó sin solución de continuidad al del subgoberandor para que avanzáramos con urgencia en la incorporación de Bancaja al SIP", ha relatado Rato.

"La salida a Bolsa se realizó en un momento especialmente complicado. El descuento al que se pudo hacer la colocación fue elevado, pero lo cierto es que Bankia obtuvo el grado de inversión, grado que no tiene en la actualidad. Desde entonces, la acción se comportó mejor que los competidores hasta mi salida del cargo", ha continuado.

Esa fusión y posterior salida a Bolsa de Bankia ha sido investigada durante cinco años por la Audiencia Nacional y este año se abrirá juicio oral contra Rato y otra treintena de exdirectivos de la entidad por presunta estafa. Al respecto, Rato ha vuelto a defender la veracidad de los estados contables del grupo. En ese sentido, ha explicado que ya durante la fusión, bajo su direción se encargaron varios informes a Deloitte y Pwc sobre las cuentas de Bancaja, detectando unas necesidades de provisiones de 6.900 millones de euros, mayores de las previstas por el propio Banco de España, que venía de hacer una inspección de dos años a esa caja.

En este sentido, Rato ha asegurado que el supervisor envió entonces una carta a cada uno de los consejos de administración de las cajas de BFA-Bankia indicando su pérdida estimada para los dos próximos ejercicio, y asegurando que esos agujeros eran absorbibles con los préstamos que ya les había concedido el FROB. Más aún, el exvicepresidente del Gobierno ha recordado que el fondo de rescate, que también ejerce la acusación en el caso Bankia, aprobaba trimestralmente cualquier plan de negocio e incluso las cuentas de Bankia desde junio 2010.

Al respecto, Rato ha asegurado que la causa judicial en la Audiencia Nacional sobre la entidad nacionalizada introduce "más sombras que luces sobre lo sucedido". Además, señaló que ni la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ni el Banco de España han cambiado su criterio sobre la veracidad de las cuentas de Bankia y que la entidad cumplió ?escrupulosamente? las condiciones del supervisor de los mercados.

Dardos a De Guindos

Además, Rato ha cargado contra la actitud del ministro de Economía, Luis de Guindos, y ha asegurado que el Gobierno de Mariano Rajoy quiso el rescate global de la economía española y, sin embargo, sólo logró el del sector financiero en el verano de 2012. "En junio de 2012, ha asegurado, España solicitó el único rescate que le ofrecieron" y ha destacado que, tras aceptar este programa, la prima de riesgo española llegó a 700 puntos básicos, más de 400 puntos por encima que un año antes, lo que contribuyó a que entre enero y septiembre de ese año, 250.000 millones salieran de la banca española, el 25% del PIB.

Otro de los dardos que ha lanzado Rato a su ex número dos ha venido cuando ha asegurado que el rescate a la banca se consiguió después de que "el nuevo ministro de Economía, a poco de asumir el cargo, se estrenara ante la opinión pública internacional afirmando que el sector necesitaba 60.000 millones".

Rato ha relatado además cómo De Guindos, encargó a "los principales competidores de Bankia" la previsión de las provisiones que podría necesitar la entidad que él entonces presidía, antes de su nacionalización, y que estos mismos bancos fueron "los grandes receptores de los depósitos que salieron" tras su rescate. Rato ha añadido que el Banco de España fue excluido de estos encuentros, y ha llegado a decir que, en realidad, se le ocultaron.

"Durante mis conversaciones con Guindos sobre Bankia en marzo, abril y mayo de 2012, este se apoyó en los principales competidores a los que llegó a encargar realizar cuáles eran las necesarias provisiones para Bankia. Estos mismos competidores fueron, sin duda, los grandes receptores de depósitos que salieron de Bankia tras su nacionalización en el verano de 2012", ha explicado.

"En mi opinión personal, por lo que valga, es que se le ocultaron estas reuniones", ha dicho, recalcando que, mientras, el supervisor, gobernado entonces por Miguel Ángel Ordóñez, se encontraba aprobando las propuestas de aprovisionamiento que le hacía Bankia para cumplir con las exigencias del decreto Guindos I. "Las acciones de Bankia se desplomaron cuando De Guindos ordenó mi dimisión. Hasta entonces se había comportado mejor que la competencia", ha asegurado

Réplicas

Como era previsible, los diputados han echado en cara a Rato el alto coste que el rescate de Bankia ha supuesto para las arcas públicas, pese a que su privatización aún no se ha completado. En este sentido, el expresidente de la entidad ha dicho que él solo responde por los 4.600 millones de euros que Caja Madrid solicitó en 2010 para abordar la fusión fría, pero no por los 19.000 millones que pidió posteriormente José Ignacio Goirigolzarri para reflotar el banco.

Rato siempre ha defendido que su plan para Bankia incluía menores ayudas públicas, y que la nueva dirección que tomó las riendas del banco tras su cese y el rescate del banco pidió de más. En este sentido, Rato ha insinuado que el Gobierno, y en concreto el ministro de Economía, Luis de Guindos, dio vía libre a Goirigolzarri para pedir la cuantía que quiesiese, ignorando incluso para ello al Banco de España. Para ello ha recordado la versión sobre esos hechos dada por el exgobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez, que en el Senado acusó a De Guindos de apartarle de la gestión del rescate de Bankia y de no consultar al Banco de España sobre las necesidades de capital de la entidad.

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