Fillon relanza su programa económico en vísperas de su posible inculpación

Cuarenta y ocho horas antes de su posible inculpación judicial, por presuntos delitos de extorsión de fondos públicos, François Fillon,[…]

Cuarenta y ocho horas antes de su posible inculpación judicial, por presuntos delitos de extorsión de fondos públicos, François Fillon, candidato conservador a la presidencia de la República, insiste en la «ruptura liberal» de su programa económico.

Fillon presentó su programa económico el pasado mes de noviembre: muy liberal (a la francesa) en lo económico, y muy conservador en cuestiones de sociedad y cultura. Fue apoyado masivamente por los militantes y simpatizantes que lo eligieron candidato de Los Republicanos (LR) a la presidencia de la República, sin poder saber que el mismo Fillon había ofrecido a su esposa Penelope un empleo presuntamente ficticio, como asistenta parlamentaria, que le permitió cobrar más de 900.000 euros.

El descubrimiento de ese presunto empleo ficticio se transformó en un escándalo mayúsculo. Fillon pudiera ser inculpado este miércoles por presunta extorsión de fondos públicos: ofrecer a su esposa un presunto empleo, sin prestación laboral conocida.

Fillon se considera víctima de un intento de «asesinato político», y dos días antes de su presunta inculpación ha intentado este lunes «relanzar» su proyecto de «ruptura liberal», con una entrevista al diario económico «Les Echos», repitiendo las grandes líneas de su programa económico: supresión de la semana laboral de 35 horas, supresión de 500.000 puestos de funcionarios, recorte de unos 100.000 millones de euros del gasto público, reducción de un 25 % de los impuestos que pesan sobre las empresas, aumento del IVA, retraso de la jubilación ?más allá? de los 65 años.

Fillon fue elegido candidato de Los Republicanos (LR), en las primeras elecciones primarias de la historia del centro y la derecha francesa, apoyándose muy mucho en la ruptura que prometió y no llegó a realizar Nicolas Sarkozy, entre 2007 y 2012. Insistiendo en que él realizará la ruptura pendiente, Fillon consiguió el apoyo familia de la opinión pública moderada y conservadora.

Los sondeos anunciaban a Fillon una victoria total, en la primera y la segunda vuelta de las presidenciales del 23 de abril y el 7 de mayo próximos. El estallido del «Penelopegate», el escándalo del presunto empleo ficticio del que se beneficio se esposa, dio un frenazo brutal a la campaña de Fillon, que esperan relanzarla y escapar a la «pinza» de Marine Le Pen, extrema derecha, y Emmanuel Macron, social reformista, los adversarios que, según los sondeos, podrían eliminar al candidato conservador en la primera vuelta.

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