El MAB, ¿Herido de muerte?: Así nos la metió Jenaro García

La sensación entre las gestoras es miedo, mucho miedo. La consigna en alguna muy puntero es, el MAB, ni tocarlo. 

Cuando las empresas suben en bolsa es acierto de los gestores, de los reguladores y de los inversores, pero cuando bajan, la culpa es de los malvados especuladores. Así de crudo contaba las cosas Daniel Lacalle en 'Nosotros los mercados', y con el caso de Gowex hemos comprobado una vez más que aunque los especuladores van a lo suyo, que es hacer dinero, las empresas (algunas), los analistas y los supervisores tampoco tienen motivos para sacar pecho. 

Cuando el pasado martes, al filo de las diez y media de la mañana, los portales de Internet nos hacíamos eco de una desconocida firma llamada Gotham City Research, que literalmente estaba poniendo las pilas a Gowex, muy pocos daban crédito a lo que estaba pasando. La niña bonita del MAB, la estrella del mercado alternativo junto con Carbures, señalada desde Estados Unidos como una mentirosa. Difícil de creer, pero no para el mercado, que le propinó un castigo del 46% al final del día. 

Esa caída llegó porque apenas hubo reacción alguna por parte de la empresa, más allá de negar los hechos. No sacó a relucir ni un solo contrato, y ahora se entiende por qué. He de reconocer que quien suscribe estas líneas, como tantos otros periodistas, entrevistó a Jenaro García. Fue en febrero de 2012, cuando todo eran miel y hojuelas. Nos despachó este titular: "El objetivo es mantener el dividendo: No habrá sustos con los resultados". Evidentemente, nos la metió con vaselina, como se dice vulgarmente. Por aquél entonces, como se ha visto ahora, llevaba dos años aplicando contabilidad ficción en Gowex. 

Eso sí, tampoco nos andamos por las ramas, y en la segunda pregunta le espetamos directamente a Jenaro García: ¿De Dónde vienen los ingresos?, y esto nos respondió: "El ayuntamiento paga por el despliegue de la ciudad 'wifi' y después nosotros tenemos ingresos recurrentes que vienen bien del 'roaming', es decir, lo que pagan los operadores porque sus clientes se puedan conectar, también de los ciudadanos que quieren pagar por un servicio mejor (premium) y de la publicidad o el comercio electrónico, además de los contenidos de alto valor añadido que podemos generar a través de nuestra plataforma de información geolocalizada. Por ejemplo, Madrid es la única ciudad en el mundo que tiene 'wifi' en todos los autobuses. Y todo lo hacemos nosotros". Sonaba bien, había informes que lo avalaban. Pero todo eran castillos en el aire. 

La cuestión más peliaguda ahora es saber cómo queda el MAB. Durante esta semana hemos tenido la oportunidad de charlar con numerosos gestores, muchos de ellos inversores del mercado alternativo. Y la palabra que define su estado de ánimo es común a todos ellos. Miedo, mucho miedo. El caso Pescanova ha dejado bien claro que todo es posible. Por eso, no es de extrañar que desde alguna gestora nacional muy puntera se haya dado la orden a todos los empleados de que el MAB, por ahora, ni tocarlo. Y si esto pasa en España, no les quiero ni contar cómo tienen que estar en el extranjero. 

También hemos hablado con los reguladores, que nos pedían calma y nos emplazaban a que mañana la empresa diera explicaciones. Evidentemente, estaban en el guindo, como nosotros cuando entrevistamos a Jenaro García. Pero ellos son los que tienen que controlar. Sería bueno que a partir de ahora se replantearan el sistema y los mecanismos de control para evitar un nuevo 'expediente Gotham' en un mercado que, si nadie lo remedia, parece estar herido de muerte.

En portada

Noticias de 
Salir de la versión móvil