UGT propone jornada de 32 horas e impuesto a robots por la pérdida de empleo

El secretario de Política Sindical de UGT, Gonzalo Pino, ha avanzado hoy la propuesta del sindicato para paliar la pérdida de puestos de trabajo que se prevén con la digitalización y automatización, que pasa por reducir la jornada laboral a las 32 horas y por un impuesto a los robots.

En declaraciones a los medios previas a una conferencia sobre "El futuro del trabajo" celebrada en Zaragoza con motivo del 130 aniversario de la UGT, el dirigente sindical ha indicado que escenificarán en los próximos días esta propuesta, con la que buscan equilibrios que frenen una confrontación ante el nuevo escenario laboral.

Así, ha considerado que, conforme vaya avanzando la tecnología, se ha de tender a una reducción de la jornada laboral hasta las 32 horas semanales para repartir el trabajo restante.

Del mismo modo, ha dado por hecho que las nuevas tecnologías, la robotización o la automatización van a generar un paro estructural a lo largo del tiempo que necesitará recursos para sostenerlo.

Pino ha abogado por obtener dichos recursos de lo que ha llamado "impuesto a los robots" y lo ha justificado en el importante aumento de la productividad que experimentarán las empresas con las nuevas tecnologías, que cree que debe servir para sostener a los millones de trabajadores que van a ser expulsados del mercado, gran parte de ellos sin posibilidad de volver.

"La sociedad a la que vamos va a tener un menor número de trabajadores", ha advertido, y ha instado a "pensar qué va a ocurrir y no dejar que los acontecimientos nos desborden".

Ha aclarado que cuando hablan de reparto del trabajo es siempre con mantenimiento del salario, dado que son los mayores niveles de productividad los que deben permitir ese reparto y, al mismo tiempo, el sostenimiento de un paro estructural que "se va a producir".

Pino ha asegurado que ya hay trabajadores fuera del mercado que hay que atender y que este no es un problema ni del Gobierno ni de la sociedad, sino de aquellos que van a obtener mayores beneficios con la implantación de estos nuevos modos de producción, en referencia a los empresarios.

A este respecto, ha sostenido que ya se empieza a ver "la punta del iceberg" y que ya se produce un desplazamiento del empleo, así como el predominio de plataformas como Uber, Deliveroo o Amazon, que promueven un tipo de trabajo "en precario" y con "condiciones pésimas", que además obliga a que esos empleados sean por cuenta propia cuando en realidad dependen de su compañía, que marca horarios y condiciones, como han reconocido los tribunales en la mayoría de los casos.

"Quieren llevar a un futuro en el que la precariedad sea la regla de juego y ese no puede ser el futuro", ha denunciado, a la vez que ha urgido a resolver el presente porque entonces "quizá el futuro será mucho más incierto de lo que estamos viviendo en este momento".

El dirigente sindical ha defendido que estas organizaciones, sin llegar al ludismo del siglo XIX en el que se intentaban parar las máquinas, sí deben decir que el futuro debe contar con los trabajadores, que no son "algo amorfo" y que no se puede volver al feudalismo.

Ha llamado la atención también sobre el hecho de que el aprovechamiento de las nuevas tecnologías "solo va a parar a un bolsillo".

"Algo se tiene que haber aprendido de la historia", ha remarcado, así como que es necesario buscar equilibrios que superen cualquier confrontación y ha rechazado que "se nos dé por hecho que el futuro es el que va a ser y no tiene vuelta atrás".

Por su parte, el secretario general de UGT Aragón, Daniel Alastuey, ha señalado que la conferencia de hoy coincide con un debate que prepara la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre las nuevas tendencias en el empleo.

En este aspecto hay "muchísimos aspectos que tocar", ha afirmado, como la demografía, el medio ambiente, las nuevas tecnologías o la mundialización del trabajo.

A su juicio, los sindicatos deben acompañar a los trabajadores en el proceso, ya que "mientras se llega a los sitios hay muchos problemas, muchos riesgos, mucho dolor y mucha gente que se queda en el camino".

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