Empleadas de hogar y peón agrícola, los más precarios entre los extranjeros

Las empleadas de hogar y los peones agrícolas son dos de los colectivos que más precariedad sufren entre los trabajadores extranjeros al ser muy difícil la promoción y verse obligados, cuando están en situación irregular, a aceptar condiciones leoninas, incluso bajo amenaza, para conseguir una autorización de trabajo.

Así lo ha asegurado hoy el responsable del departamento de Migraciones de UGT Aragón, Antonio Ranera, en la presentación del informe "Abusos laborales: atrapados en la precariedad" junto a la secretaria de Formación y Empleo de UGT Aragón, Pura Huerta, quien ha recordado que en Aragón hay actualmente 140.000 inmigrantes y que los más vulnerables del colectivo son las empleadas de hogar y los peones agrícolas porque su actividad es la más precaria.

Una precariedad, ha destacado Ranera, en la que se ven "atrapados" estos empleados, aunque también afecta a quienes trabajan en sectores como el comercio, la hostelería, la ganadería o los transportistas que son falsos autónomos.

Ha concretado que el 12 % de los afiliados a la Seguridad Social en Aragón son personas extranjeras, pero en el caso de las empleadas del hogar -un sector altamente feminizado al estar ocupado en un 97,1 % por mujeres- se eleva al 55 % de los 11.796 afiliaciones totales, con procedencia mayoritaria de Rumanía y Nicaragua, seguidas de Honduras y República Dominicana.

De cada diez autorizaciones de trabajo y residencia que se conceden en Aragón, cuatro están destinadas a ofertas de empleo doméstico, lo que indica una presencia de personas extranjeras en situación irregular que trabajan sin la autorización, fundamentalmente de países centroamericanos y que trabajan como internas, expuestas a situaciones de explotación.

"Son las que sufren más abusos dentro de los abusos", porque en ocasiones se ven sometidas a amenazas para poder conseguir en tres años la autorización de trabajo por arraigo social y aceptan cualquier tipo de condición laboral, y desprotegidas ante posibles acosos o abusos sexuales.

Además, en este sector, que adolece de presentaciones por desempleo una vez termina la actividad laboral y que tienen pensiones un 40 % por debajo de la media, se mezclan el ámbito de los cuidados con las tareas de limpieza doméstica, de forma que las empleadas de hogar realizan en muchas ocasiones labores para las que no están preparadas ni formadas.

El sector de peones agrícolas, que también sufre una eleva temporalidad vinculada a las campañas con afiliaciones medias que oscilan entre 9.700 trabajadores en marzo y 24.148 en junio, es fundamentalmente masculino (el 76,6 % frente a un 23,4 % de mujeres), en época de campaña, en un 80 % ocupado por extranjeros, la mayor parte de Rumanía y Marruecos, seguidos de países del África Subsahariana.

Ranera ha destacado, respecto a la situación de la mujer en este sector, que trabajan menos días -tienen contratos con once días menos de media-, y eso repercute en las prestaciones por desempleo.

Esta es la segunda ocupación que aglutina más autorizaciones de trabajo y residencia en Aragón, de forma que comparte con el empleo doméstico ser un "trabajo refugio" para las personas en situación irregular para conseguir regularizar su situación, un periodo en el que están "más desguarnecidas" ante la explotación laboral, con supuestos minoritarios de trata de seres humanos.

Se trata de un sector que ha evolucionado en los últimos 25 años, pero persisten los bajos salarios, la dureza del propio trabajo y el pago por debajo de convenio, y también la infradeclaración de jornadas por parte de los empleadores, lo que supone un fraude a la Seguridad Social y afecta a las prestaciones por desempleo, de forma estos trabajadores son doblemente agredidos en sus derechos laborales.

Además, ha denunciado que las empresas de trabajo temporal son las que protagonizan el mayor número de irregularidades en el campo aragonés, ya que reclutan a los trabajadores más vulnerables, en concreto los que se desplazan en pequeños grupos procedentes del extranjero o los temporeros que trabajan durante la recogida de la fruta.

"En Aragón podemos unir sectores económicos con unas condiciones laborales duras con sobrerrpresentación de personas extranjeras", ha aseverado Ranera, quien ha apuntado que los trabajadores de estos dos sectores concretos se ven "atrapados en la precariedad".

Ante esta situación, el sindicato propone, además de la derogación de la reforma laboral, una mesa nacional que deslinde el trabajo doméstico de los cuidados, la actuación de la Inspección de Trabajo, con mucha más contundencia en el sector agrícola, y fomentar el trabajo en red de todos los sectores implicados para detectar la explotación y en algunos casos la trata de seres humanos.

UGT ha presentado este informe con motivo de la conmemoración el 21 de marzo del Día Internacional contra el Racismo, en la que el sindicato, junto a otras entidades, participará en una manifestación convocada a las 19.00 horas, entre la plaza de España y la Delegación del Gobierno, para reivindicar un mundo sin racismo, xenofobia y discriminación.

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