Las cuentas claras de BBVA contra la crisis

Las Cuentas Claras fue una promoción que lanzó BBVA en 2004 para facilitar a los clientes la relación con el[…]

Las Cuentas Claras fue una promoción que lanzó BBVA en 2004 para facilitar a los clientes la relación con el banco y agrupar todas las comisiones y pagar menos por los servicios más comunes. Ahora, cuatro años después, ha adaptado su oferta comercial de hipotecas, nóminas y depósitos a una situación de crisis que promete alargarse hasta la depresión.

 

La iniciativa, como la del Gobierno de aplazar la mitad del préstamo hipotecario durante dos años, no está mal, sobre todo porque ayudará a más de uno a sobrellevar la situación con algo más de holgura, amén de sacar algunos euros por productos de ahorro algo más competitivos que los que tenía hasta la fecha.

Pero la verdad es que, pese a que la entidad le ha dedicado más de un año a este conjunto de propuestas, hay que hacer muchos números para que las cuentas sean claras y atractivas. Si nos alejamos del titular -regalo de 200 euros por hipoteca y 200 euros de aportaciones para los planes de pensiones los autónomos-, la comparativa no aguanta mucho.

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Aunque BBVA da hasta 2.400 euros por trasladar tu préstamo desde otro banco o caja, la entidad con sede en Bilbao no se hace cargo de los costes del cambio, que, como saben, pueden ascender tirando por lo bajo a al menos 3.000. Además, su hipoteca debe de ser de al menos 120.000 euros y quedarse usted en BBVA al menos durante 15 años. Una relación ad eternum poco atractiva si se tiene en cuenta, además, que el tipo de interés más barato que concede BBVA es al 0,55% - la media del banco ronda el 1%- a cambio de dejarte allí hasta las señas de identidad.

Algo similar ocurre con la percha comercial para atraer las nóminas de devolver el aumento del IPC de los recibos de la luz, el gas, el teléfono, el móvil e Internet, hasta un máximo mensual de 20 euros. La cosa tiene truco porque BBVA sabe que la inflación tenderá en los próximos mese a casi 0 en un escenario de recesión como en el que estamos metidos. De lo contrario, estaríamos en los que se denomina estanflación, -crecimiento negativo del PIB y subida de los precios- algo que ha ocurrido muy pocas veces en la historia.

Y qué decir de los depósitos. Lo más rentable que ofrece BBVA es el 5% al año para dinero procedentes de otros bancos. Poca cosa viendo ofertas por todos los sitios todavía por encima del 6% a falta de que se adaptan a las bajas de los tipos de interés.

No les revelo nada si apuntamos que muchas entidades dan hipotecas más baratas, que también devuelven el 2% de los principales recibos, con tarjetas gratis, y que los depósitos son más generosos, sobre todos los de Internet. Como suele pasar en estos casos, la letra pequeña es más grande que el titular.

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