'Hiperdesplome': Carrefour se hunde un 13% tras resultados

Las acciones de Carrefour se hunden esta mañana un 13% y descuenta con fuertes caídas los resultados que ha presentado[…]

Las acciones de Carrefour se hunden esta mañana un 13% y descuenta con fuertes caídas los resultados que ha presentado hoy la compañía. A nivel global, ha obenido un beneficio neto atribuido de 78 millones de euros, una cifra un 39,5% por debajo del resultado correspondiente al primer semestre de 2016, mientras que su endeudamiento neto aumentó un 4,8%, hasta 7.720 millones.

Además, y esta es la noticia que ha alarmado al mercado, el gigante francés de la distribución ha indicado que la segunda parte del año será todavía más dura que esta, poniendo así el listón muy alto al nuevo consejero delegado de la compañía, Alexandre Bompard. "Nuestros resultados de 2017 se verán afectados por nuestro desempeño en el primer semestre y un entorno operativo que seguirá siendo difícil durante la segunda mitad del año en algunos países", advirtió la compañía.

Entre enero y junio, Carrefour facturó un total de 43.053 millones de euros, un 6,2% más que un año antes, aunque sin tener en cuenta el impacto del cambio de moneda el incremento interanual fue del 3,3%.

Factura más en España

La facturación de la cadena francesa de distribución minorista Carrefour en el mercado español durante los seis primeros meses del año alcanzó un total de 4.413 millones de euros, una cifra que supone una mejora del 6,9% respecto al mismo periodo de 2016, después de la "exitosa" integración de las tiendas Eroski adquiridas por la multinacional.

El nuevo presidente de Carrefour, Alexandre Bompard, anunció un plan de transformación" que se detallará antes de fin de año y del que ya avanzó varias pistas. Bompard dijo que "Carrefour debe convertirse verdaderamente en (una empresa) omnicanal", "acelerar su transformación digital" pero también "reformar y adaptar" los hipermercados -bajo la presión del comercio electrónico en los productos no alimentarios-.

El directivo pretende además "simplificar la organización" para ganar agilidad, pero también "reforzar las sinergias entre los países, las entidades y los formatos". El objetivo final es responder a las demandas del mercado y "aumentar la rentabilidad", el principal problema del grupo de distribución, como pusieron en evidencia las cuentas del primer semestre.

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