Los niños prodigio de las criptomonedas se pasan al lado oscuro

La quiebra de FTX con el treintañero Sam Bakman-Fried al frente no es un caso aislado. Otros niños prodigio de las criptomonedas han volatilizado el dinero de sus clientes

Transcripción del podcast

Stefan Qin con tan solo 19 años creó un fondo de cobertura de criptomonedas con el que se jactaba de haber obtenido una rentabilidad del 500%. Esto atrajo a un elevado número de inversores que confiaron en este año niño prodigio.  

Publicidad

Pero todo era mentira, una estafa piramidal de las de siempre, que le sirvió para quedarse con 90 millones de dólares de sus clientes y vivir con todos los lujos antes de ser detenido por la policía. 

Esta es la realidad del mercado criptográfico. La mayoría de los fondos están gestionados por estudiantes universitarios o recién graduados, sin experiencia en las finanzas.

Todos brillaban en Matemáticas en la universidad y creían haber descubierto la piedra filosofal de la inversión en criptomonedas. Pero la realidad es que una buena parte de ellos acaba en el lado oscuro de este mercado y cometiendo fraudes con los activos digitales.

El caso más llamativo 

La lista sigue creciendo, aunque pocos casos han sido tan llamativos como el último. El pasado junio, en plena crisis del mercado de las criptomonedas, emergió la figura de Sam Bankman-Fried. Con una serie de rápidas operaciones intentó rescatar una tras otra las plataformas de intercambio de criptomonedas que habían colapsado. 

El sector alabó su intervención en defensa del universo criptoactivo. Sus seguidores veían en este treintañero alguien que iba a marcar una nueva era, porque se desmarcaba de las prácticas habituales de centrarse únicamente en el crecimiento.  

Publicidad

Sam Bankman-Fried  presumía de primar la rentabilidad en sus proyectos, con una gestión hábil del capital. Y los expertos anunciaban que en este segundo semestre del año sus firmas se convertirían en las más influyentes del sector. 

Publicidad

Actividades sospechosas con sus clientes

Pero lo que nadie se esperaba es que detrás de lo que parecía una estrategia brillante había una serie de actividades sospechosas con los fondos de los clientes. 

El conocido como barón de las criptomonedas había transferido hasta 10.000 millones de dólares de FTX a otra de sus compañías, Alameda. Y de aquí hay 1.000 millones de dólares de sus clientes que nadie sabe dónde han ido a parar. 

Por eso, la decepción ha sido tremenda. Si ha fallado el barón de las criptomonedas, el único en quien se podía confiar, la luz se apaga para los criptoactivos. 

Publicidad

La industria necesita una reconstrucción total y una aceleración de las normas por parte de los reguladores, para proteger a los inversores. Porque son demasiadas plataformas de intercambio de criptomonedas en bancarrota con el dinero de los clientes desaparecido.  

La crisis de FTX puede herir de muerte la confianza en el sector, porque no era una firma más, era el futuro, la única capaz de acabar con el largo criptoinvierno.

Su fracaso es un golpe muy duro para los criptoinversores, que se quedan sin referencias. Y la sombra de la sospecha se extiende sobre el resto de las plataformas de intercambio de criptomonedas,

El criptoinvierno se eterniza, no tiene fecha de caducidad, ni salida de emergencia.

Publicidad
Las pautas de finanzas.com

Nuestros boletines son valiosos para inversores y líderes financieros. Denos la oportunidad de demostrárselo. Si le decepcionamos: cancele, sin más.
Gracias por su confianza.

En portada

Noticias de