Bentagoyhe, el promiscuo rey de los canarios que murió por una ETS
Al antiguo rey o guanarteme de Telde, en Gran Canaria, le iba la marcha. En medio del la Conquista de[…]
Al antiguo rey o guanarteme de Telde, en Gran Canaria, le iba la marcha. En medio del la Conquista de las islas, el Guanarteme de Telde murió por una enfermedad del transmisión sexual (ETS) a la que los cronistas, para salvar la cara de los antiguos canarios en la Península, la ocultaron bajo la denominación de "epidemia". Concepto que provocó mala imagen de las tropas castellanas de las islas. Sin embargo, era otra cosa.
Uno de los que sembró en Europa mala imagen castellana ante epidemias por la Conquista de las islas fue el francés Verneau, que sostuvo: "Dicho mal existía en las Canarias muchos años antes de la conquista por los Reyes Católicos, por consiguiente, hay que pensar que fue traído a las Afortunadas en una de las tantas incursiones que llevaron a cabo los portugueses, normandos, mallorquines, aragoneses, gallegos, castellanos, sevillanos, etc.". Con el paso de los años rectificó y pidió disculpas.
Bentagoyhe fue el padre de Bentejuí que, de acuerdo con las crónicas de la época, se suicidó junto a su tutor Tazarte el 29 de abril de 1483, en la fortaleza de Ansite. En la zona de Telde, según los datos de Abréu, en esa época había 14.000 hogares.
La ETS del padre de Bentejuí es una de las conclusiones Juan Álvarez Delgado, prestigioso filólogo canario e historiador que, en 1932, ganó la cátedra de Latín en el instituto de Santa Cruz de la Palma ante un tribunal presidido por Miguel de Unamuno.
Para Álvarez Delgado, en los textos antigios "epidemia" o "peste" son expresiones frecuentes, "equivalentes entre sí, pero imprecisas en su valoración para nuestros autores". "Tampoco podemos negar la existencia en Gran Canaria de una epidemia durante ese siglo de operaciones para su c
onquista castellana, o en la que muriese el Guanarteme de Telde, Bentagoyhe, y otros muchos indígenas, o en los años inmediatos a 1476. Porque nuestros textos documentan varias epidemias en ese siglo antes y después de la conquista castellana de las islas".
De acuerdo con uno de sus estudios, al que ha tenido acceso ABC, la promiscuidad fue lo que se llevó por delante a Bentagoyhe, el Guanarteme de Telde. Siempre se ha dicho que murió por una epidemia, pero los textos investigados por Álvarez Delgado indican que la epidemia que llegó a la isla por los castellanos. Era por otra cosa: calentura.
Y no solamente fue Bentagoyhe cayó por el camino. Además del monarca de los antiguos canarios en Gran Canaria "otros muchos indígenas, o en los años inmediatos a 1476" murieron prpducto de su descontrol fornincando. También en Tenerife sobre 1496 la promiscuidad acabó con muchos canarios.
Cronistas de la época como Abréu y Torriani camuflaron esta situación con argumentos del tip diciendo que estas muertes eran producto de "habiendo desagradado a Dios, su impío atrevimiento, Dios fue servido de dar en esta isla una grave enfermedad".
Viera y Clavijo, por su parte, menos crédulo "de ese innecesario milagro que el franciscano Abréu Galindo, lo explica así: "Esta inhumana ley no estuvo mucho tiempo en observancia, porque la misma naturaleza con una enfermedad epidémica evacuó e1 país y murió casi la tercera parte de la nación".
Por la tradición oral de la época, "nuestros escritores cargaron arbitrariamente" parte de esas muertes a normativas como el estatuto de matar niñas "que ellos aceptaban de buena gana". Una norma que fue dictada para obviar la falta de mujeres casaderas, causada por la ley de infanticidio, hasta 1450, en que Azurara habla de la merma de población insular.
Y esta práctica tuvo su "natural consecuencia, por secuela normal de enfermedades venéreas determinadas por la promiscuidad sexual de mujeres ligadas hasta a cinco maridos simultáneamente". Esa fue la causa de la muerte del Guanarteme de Telde.
La ley de infanticidio, que pudo estar vigente de 1450 a 1470, aproximadamente, generó un clima de promiscuidad sexual, "determinante de contagios venéreos", aunque le llamaban peste, que, "entre otros, llevó a1 sepulcro al guanarteme de Telde
Bentagoyhe, según testimonio de Abréu Galindo, hacia el año 1476".
Y es que Abréu Galindo afirma que la población de la isla mermó por esas epidemias "dos tercios" aunque Torriani indica que ese descenso de población fue mayor. Juan Álvarez Delgado sostiene que, de acuerdo con sus estudios, "la merma de la población de la isla entre 1404 y 1450".