Un arco para contener durante un siglo la radiación de Chernóbil
Una nueva cubierta en forma de arco recubre el sarcófago del reactor nuclear que, tras explotar, provocó el accidente de[…]
Una nueva cubierta en forma de arco recubre el sarcófago del reactor nuclear que, tras explotar, provocó el accidente de Chernóbil. El objetivo es protegerlo de las agresiones climáticas y de confinar la radioactividad.
Concebido para durar un siglo, este arco metálico fabricado en Italia reposa sobre dos vigas rectangulares de hormigón y pesa 36.000 toneladas, tres veces el peso de la Torre Eiffel. Mide 180 metros de alto, el equivalente a un piso de treinta plantas.
El arco cubre el sarcófago construido a toda prisa después del accidente nuclear de Chernóbil, una estructura levantada en tan solo seis meses por obreros soviéticos conocidos con el nombre de «liquidadores ». La explosión se produjo en el reactor 4 de la central el 26 de abril de 1986.
En cuatro años, 600.000 «liquidadores» fueron llevados a las inmediaciones del lugar del accidente sin apenas protección, y en algunos casos sin ninguna, para apagar el incendio, aislar el reactor y limpiar los alrededores. Muchos de ellos murieron.
El nuevo arco tiene dos objetivos: «Encerrar los restos radioactivos y permitir el desmantelamiento futuro del reactor accidentado, además de la retirada de 200 toneladas de magma altamente radioactivo del antiguo sarcógafo», que ahora será tapado «durante los 100 próximos años», según ha explicado a AFP Nicolas Caille, director del proyecto.
El arco dispone de equipamientos e instalaciones que permiten las futuras operaciones de desmantelamiento del reactor, en «condiciones de máxima seguridad» y limitando «al máximo las intervenciones humanas», según Novarka, la sociedad que ha realizado la obra.
El arco ha sido concebido para resistir temperaturas entre los -45 y los 45 grados centígrados. Además, «si el sarcófago se hunde en el interior del arco protector» durante un temblor de tierra, «los desperdicios quedarían confinados bajo el arco», ha indicado Caille.