El antichavismo, dividido tras las últimas elecciones regionales
El controvertido diálogo entre la oposición y el régimen de Nicolás Maduro ha logrado fragmentar a la coalición Mesa de[…]
El controvertido diálogo entre la oposición y el régimen de Nicolás Maduro ha logrado fragmentar a la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), hasta el punto de que ahora pocos se atreven a recoger los platos rotos de lo que queda de la organización antichavista.
La MUD nació hace 7 años como una plataforma electoral integrada por 19 partidos de centro, derecha e izquierda. Siempre han existido diferencias en su interior, pero jamás ha estado tan amenazada por la división como después del fracaso de la oposición en las elecciones regionales del 15 de octubre.
Al diálogo previsto en República Dominicana los días 1 y 2 de diciembre asistirán los partidos con mayor número de diputados de la oposición venezolana con el objetivo de lograr garantías electorales con vistas a las presidenciales de 2018.
Cada vez que Maduro se ve en un aprieto o quiere dar la imagen al mundo de que es un demócrata, anuncia que está conversando con la oposición, aunque ésta lo desmienta. Este juego político le ha servido para ganar tiempo en las diversas ocasiones en que la oposición lo ha puesto contra las cuerdas, como al exigirle el año pasado la convocatoria de un referéndum revocatorio y este año para desinflar las protestas con la celebración de las regionales.
La razón principal de las discrepancias sobre la participación en el diálogo es la falta de confianza en la palabra de Maduro. Las voces más críticas en ese aspecto son Antonio Ledezma (Alianza Bravo Pueblo), María Corina Machado (Vente Venezuela) y el exembajador Diego Arria. Juntos han lanzado la plataforma Soy Venezuela. Ledezma, alcalde de Caracas que se halla en España tras escapar de su arresto domiciliario el pasado 17 de noviembre, sostiene que la MUD solo debe acudir al diálogo para negociar la salida de Maduro.
Presos políticos
Alfredo Romero, director de la ONG Foro Penal Venezolano, lamentó por su parte que la oposición no tenga «claridad de propósitos». El Foro Penal rechazó este lunes que se desconozcan aún las «exigencias previas» de la oposición sobre «la situación de los presos políticos, perseguidos y exiliados». Esta organización aboga por establecer como requisito previo la liberación «sin condiciones de todos los presos políticos», así como «el cese inmediato y definitivo de cualquier forma de persecución injusta». Este grupo pretende que la MUD maneje su lista de presos, que tiene el aval de organismos internacionales.
