Los emergentes y la construcción sostenible ganan peso

Las gestoras confían en los mercados emergentes pese al impacto de la guerra de Ucrania para ampliar oferta, así como en la construcción verde

Las mayores gestoras de activos mantienen su apuesta por fondos cotizados -ETFs- orientados a mercados emergentes, pese al golpe sufrido por estos productos a raíz de la guerra de Ucrania.

La invasión de Rusia provocó una serie de sanciones entre las que se incluyó la congelación de miles de millones de activos en el país y ha provocado el borrado de sus valores en los índices de proveedores como MSCI y Stoxx.

Esto dejó a un amplio porcentaje de ETFs con mandato sostenible atrapados en un limbo que generó pérdidas importantes en el primer trimestre, y que arrastran tras cumplirse la primera mitad de abril.

El impacto del conflicto bélico no ha sido, sin embargo, determinante para que la industria de la inversión responsable continúe lanzando productos vinculados a emergentes. La diferencia es que ahora el foco se centra en otro gigante económico, China, y en valores de las bolsas asiáticas alineados con los compromisos climáticos globales.

HSBC suma dos ETFs ‘verde oscuro’

HSBC Asset Management ha sido una de las últimas entidades que ha ampliado su catálogo con dos ETFs clasificados como artículo 9, la mayor categoría en sostenibilidad del Reglamento de Divulgación (SFDR) europeo.

Ambos pertenecen a la gama de fondos sostenibles que la gestora del banco suizo tiene alineada con los Acuerdos de París, cuyo objetivo es reducir la inversión en empresas vinculadas a los riesgos de la transición energética o y aumentar en aquellas que aprovechen las oportunidades ‘verdes’ generadas por la descarbonización.

Todos los valores deben estar alineados también con el objetivo de mantener el calentamiento global por debajo de los 1,5 grados para 2050.

El primero replica el índice MSCI Emerging Markets Climate Paris Aligned, que entre enero y marzo perdió más de un 7 por ciento. El segundo ETF, HSBC MSCI AC Asia Pacific ex-Japan Climate Paris Aligned Ucits, replica otro índice, también elaborado por MSCI, que registró pérdidas similares en el trimestre, y ambos cuentan con una composición similar.

China es, con más de un 30 por ciento en ambos casos, el país que más peso ocupa en la cartera de ambos fondos, mientras que las acciones vinculadas a las tecnologías de la información y al sector financiero representan más de la mitad.

India, Corea, Australia… los otros emergentes

El fabricante de chips Taiwan Semiconductor es la cotizada con mayor peso en ambos ETFs, con más de un 7 por ciento, seguido de grandes tecnológicas asiáticas como Tencent, Samsung y Alibaba.

Después de China, algunos países como Corea del Sur o Australia, alineados desde hace varios años con los compromisos climáticos globales, son algunas de las regiones a las que mayor exposición tienen estos ETFs.

Sin embargo, otras como Arabia Saudí o la India, que retrasó su objetivo de descarbonización a 2070, menos vinculadas a la transición energética global, también ocupan un espacio importante en los índices que elabora MSCI, el mayor proveedor a nivel global. En concreto, las acciones saudíes superan el 5 por ciento, mientras que las hindúes marcan más del 10 por ciento en ambos fondos.

Según la metodología de MSCI, esto se debe a que los índices pretenden reducir la exposición al riesgo físico a situaciones extremas provocadas por el cambio climático en al menos la mitad, e ir cambiando progresivamente el peso del índice “de marrón a verde” excluyendo algunas empresas vinculadas, por ejemplo, a combustibles fósiles.

“Los índices pretenden aumentar el peso de las empresas expuestas a oportunidades de transición climática y con objetivos creíbles de reducción de carbono, además de reducir el de las empresas clasificadas como altas emisoras de carbono”, detallan las métricas de MSCI.

Construcción sostenible, otra vía para los ETFs

Más allá del debate que genera la inversión sostenible en emergentes, la industria va incorporando cada vez más nuevas temáticas vinculadas a la transición ecológica.

Global X, una gestora estadounidense con más de 40.000 millones de dólares en activos, lanzó esta semana un nuevo fondo con mandato sostenible, Green Building ETF, centrado en edificios ecológicos, aquellos con una huella de carbono menor y menos consumo de agua y energía.

Según las previsiones de Global X, el mercado de materiales de construcción ecológicos podría duplicarse hasta superar los 650.000 millones de dólares en todo el mundo de cara a 2028. El ETF replica, a su vez, el comportamiento del índice Solactive Green Buildings al tener más de un 80 por ciento del total de activos invertidos en valores del mismo.

Los criterios para seleccionar empresas se cimentan en tres ramas. Por un lado, aquellas que construyen, remodelan o modernizan edificios para hacerlos ecológicos. Por otra parte, cotizadas que gestionen esos edificios una vez hayan obtenido los certificados verdes, y, por último, en empresas de tecnologías y materiales de construcción ecológicos.

El requisito mínimo de capitalización para estos valores es de al menos 200 millones de dólares. Japón y Estados Unidos son las geografías protagonistas de la cartera, con un 40 por ciento del peso de la cartera en conjunto, mientras la mayor exposición se centra en acciones como China Overseas Land & investments, Boston Properties y Legrand, que se sitúan en el podio de valores.

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