Banco Santander pone límites climáticos al sector energético, la aviación y el acero
Banco Santander fija objetivos para la reducción de emisiones en su cartera a estos tres sectores, ampliando las ya impuestas al carbón. Crece en financiación verde y en activos sostenibles en el semestre
El Banco Santander ha dado a conocer algunos nuevos objetivos en materia de descarbonización de su cartera de crédito. Durante la presentación de resultados del primer semestre, el banco que lidera Ana Botín aumentó el número de industrias sobre las que aplicará criterios específicos con el objetivo de cumplir con los compromisos del Acuerdo de París.
En concreto ha fijado objetivos de descarbonización para la financiación firmada con sectores como la energía, la aviación o el acero de cara a 2030 (véase gráfico). Hasta el momento había establecido metas para la industria de la generación energética y para el carbón, donde cuenta con un plan de salida, anunciado en 2021. Sigue así al BBVA, que hace unos meses ya avanzó objetivos para una serie de industrias.
En los próximos meses, toda la banca del IBEX 35 tendrá que comenzar a publicar objetivos a 2030 para las industrias más emisoras, ya que forma parte de los compromisos adquiridos durante su admisión a la Net Zero Banking Alliance (NZBA).
Más allá de los dos grandes bancos del índice, ninguna otra entidad financiera cotizada ha avanzado objetivos concretos para determinadas industrias, por lo que lo lógico es que lo vayan haciendo en los próximos meses.
Todos los firmantes de la NZBA cuentan con un periodo de gracia para anunciar estos compromisos y, entre los cotizados, fueron el Banco Santander, BBVA y Caixabank los primeros en sumarse a la alianza. También Ibercaja se incorporó a ese grupo.
Por el momento, y aunque desde el activismo climático se lo han reclamado, ningún banco español ha votado en junta de accionistas un plan de descarbonización de su cartera.
Pero es algo que ya comienza a producirse. En la temporada que acaba de cerrarse, entidades como UBS, Credit Suisse, Barclays o Deutsche Bank se introdujeron resoluciones relacionadas con sus estrategias climáticas; por lo que de cara al futuro podríamos ver iniciativas similares en el mercado español.
Más financiación y más activos
El banco ha incrementado en 5.000 millones el volumen de financiación verde canalizada durante el segundo trimestre, hasta los 74.000 millones desde 2019. El ritmo de crecimiento entre abril y el 30 de junio ha sido inferior al de los tres primeros meses del año, cuando la cifra se incrementó en 8.000 millones.
El banco se ha comprometido a movilizar 120.000 millones en este tipo de financiación hasta 2025, pero ya habría consumido más de la mitad, lo que deja la puerta abierta a una posible revisión a mejor.
El BBVA, de hecho, ya ha mejorado en una ocasión sus objetivos y Carlos Torres, presidente del banco, no descarta una nueva actualización a mejor en el futuro. Los objetivos de BBVA están referenciados al conjunto de la financiación sostenible, por lo que también incluye crédito o bonos sociales.
Los activos sostenibles gestionados crecen en 3.000M en el semestre
Respecto a la evolución de su compromiso en activos bajo gestión sostenible -que abarca tanto a los fondos artículo 8 y 9 de Santander Asset Management, como a los fondos de terceros, como al área de banca privada-, durante el primer semestre los activos se han incrementado hasta los 30.000 millones; en 3.000 millones.
El banco había despedido 2021 con 27.000 millones de euros bajo gestión teniendo en cuenta todos los componentes que incluye en el perímetro.
El términos porcentuales, Santander AM ha sido una de las gestoras en las que más ha crecido el patrimonio en fondos sostenibles durante el primer semestre, de acuerdo con datos de VDOS.
El salto se ha logrado gracias a la reconversión de productos tradicionales en sostenibles.
