El calor extremo en España fue 10 veces más mortal en los últimos dos meses que durante el mismo período del año pasado. Se estiman 1.180 personas fallecidas debido a las olas de calor entre mediados de mayo y mediados de julio, en comparación con las 114 personas de 2024, según el Ministerio de Sanidad.

El centro de investigación Instituto de Salud Carlos III calculó el exceso de mortalidad por calor comparando el total de muertes entre el 16 de mayo y el 13 de julio de este año con el promedio histórico entre esas fechas. Las autoridades españolas emitieron un total de 76 alertas rojas por calor extremo en los últimos dos meses, en comparación con ninguna durante el mismo período de 2024.

Este junio fue el más caluroso registrado en España, con una temperatura media de 23,6 grados, 3,5 más que la media histórica entre 1991 y 2020, según la agencia meteorológica Aemet.

Más del 95% de las personas que murieron este verano tenían más de 65 años y cerca de dos tercios eran mujeres, según el Gobierno. La mayor sobremortalidad se registró en las regiones del norte (Galicia, La Rioja, Asturias y Cantabria), que históricamente han experimentado temperaturas moderadas en verano, por lo que son más vulnerables al calor extremo.

La mortalidad atribuible al calor, según el instituto, es mucho mayor que las muertes por golpe de calor notificadas por las autoridades regionales en España. Se notificaron 10 muertes de este tipo en los últimos dos meses, según el Gobierno.

Numerosos expertos dicen que estas muertes no se contabilizan en los registros porque es difícil confirmar que están relacionadas con el calor.

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