El Banco Central Europeo (BCE) está a punto de reducir los tipos de interés por última vez antes de que las perspectivas de inflación, cada vez más complejas, aviven las divisiones internas. A medida que disminuyen los riesgos de precios, las autoridades han recortado siete veces el precio del dinero en el último año, sin apenas fricción en el seno del banco central, compuesto por 26 miembros. Se espera una octava rebaja el jueves, que llevará el tipo de interés de depósito al 2%.

Pero mientras algunos desearían que ese fuera el mínimo, temerosos de un exceso de gasto por parte de los gobiernos europeos, otros quieren para apuntalar el frágil crecimiento económico.