JPMorgan excluye a Rusia de dos de sus índices de bonos ESG

La industria de la gestión de activos sigue respondiendo al ataque de Rusia a Ucrania. Tras Norges, JP Morgan expulsa al país de algunos de sus índices ESG

La industria de la gestión de activos continúa reaccionando con exclusiones y desinversiones a la crisis en Rusia. Si Norges ha anunciado que deshará sus posiciones en el país tras su ataque a Ucrania, el lunes JP Morgan avanzó que sacara la deuda rusa de algunos de sus índices especializados en renta fija ESG.

En concreto, el banco estadounidense eliminará la deuda rusa del índice JPMorgan ESG Emerging Market Bond y del índice JPMorgan ESG GBI EM Global Diversified, según explicaron a Bloomberg «fuentes conocedoras».

Este paso repercutirá en los gestores de activos que replican estos indicadores y que tendrán que vender sus participaciones. Para los institucionales que replican índices es un hándicap porque no pueden deshacer posiciones que forman parte del índice que replican por folleto.

Fondos congelados por Rusia

No es la única decisión que ha tenido que tomar JP Morgan. El gigante también ha congelado las contrataciones y los reembolsos de algunos de sus fondos con exposición a Rusia, como el JPM Emerging Europe Equity Fund, dado que no puede realizar operaciones.

El fondo contaba con un 87 por ciento de exposición a países emergentes de Europa. Entre las principales posiciones aparecían la empresa Novatek, el segundo mayor productor de gas de Rusia, y el banco Sberbank of Russia, con más de un 7 por ciento cada una.

También contaban con un peso importante Gazprom, el mayor comercializador de gas de Europa, con más de un 6 por ciento, y la petrolera Rosneft, con cerca de un 5 por ciento. Precisamente, otra petrolera, la británica BP, anunció el lunes la venta de su participación del 19,75 por ciento en Rosneft en respuesta a la ofensiva militar de Rusia.

El efecto de las sanciones a Rusia

Rusia, por su parte, trata de blindar su economía y está implementando medidas que incluyen la prohibición de que se puedan vender valores que estén en manos extranjeras en la bolsa rusa, suspendida por el momento de cotización ante la sangría de las últimas sesiones.

Estas sanciones han tenido impacto en fondos administrados por algunos de los mayores gestores de activos europeos, como Amundi y Schroder, donde las estrategias se centraban exclusivamente en Rusia o tenían una fuerte exposición a empresas del país.

“Si un fondo es un fondo de transacciones diarias, tendrá que producir un valor liquidativo diario”, dijo Jonathan Miller, director de investigación en Morningstar.

“Dado cómo está el panorama, podría resultar complicado. El último recurso sería suspender la relación comercial”, apostilló.

La renta variable rusa representó el 0,27 por ciento de los activos europeos a largo plazo en fondos de inversión y ETF. En términos absolutos, 32.800 millones de euros de un total de 12 billones en activos al cierre del pasado 31 de enero, según datos recopilados por Morningstar.

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