Los planes de pensiones celebran un buen año

El año pasado fue muy positivo para los planes de pensiones, no solo porque su rentabilidad media anual fue del 2,8 por ciento y la de los de renta variable del 8,8 por ciento, superior a la de otros activos, sino porque su patrimonio creció un 4 por ciento impulsado por las aportaciones netas.

El año pasado fue muy positivo para los planes de pensiones, no solo porque su rentabilidad media anual fue del 2,8 por ciento y la de los de renta variable del 8,8 por ciento, superior a la de otros activos, sino porque su patrimonio creció un 4 por ciento impulsado por las aportaciones netas.

«Sin duda, 2017 ha sido un muy buen año para los planes de pensiones respecto a su nivel de rendimiento», asegura José Luis Manrique, director de Estudios del Observatorio Inverco. Y es que según datos de este observatorio, el buen comportamiento de los mercados de acciones en 2017 permitió que la rentabilidad anual media del conjunto de planes de pensiones, descontados gastos y comisiones, se situara en el 2,8 por ciento, cifra muy superior a la inflación, que a finales de año fue del 1,1 por ciento, lo que supone una ganancia neta de poder adquisitivo del 1,7 por ciento. 

Según Manrique «en periodos como el actual, en que los tipos de interés están en el cero por ciento, la obtención de una rentabilidad real, neta de inflación, cercana al 2 por ciento resulta muy satisfactoria, frente a otros productos que apenas ofrecen la preservación del capital».

También Mar Barrero, analista financiero de Profim, considera «muy positivo» el rendimiento del 2,8 por ciento y más cuando 2017 «no fue un año fácil ni para los mercados de renta variable ni para los de renta fija». Afirma que la rentabilidad esté por debajo del 3 por ciento es producto «del importante peso que tienen los activos más conservadores en las carteras de los planes».

En la estructura de las carteras de los planes de pensiones durante 2017 se mantuvo la tendencia de los últimos años encaminada a reducir la renta fija y a incrementar sustancialmente la exposición a renta variable, que ha pasado de un 27,2 por ciento en 2016 a un 33,6 por ciento el año pasado.

La mayor querencia de los partícipes por la bolsa es, en opinión de Paula Mercado, directora de Análisis de VDOS, una de las causas de que 2017 pueda considerarse un año «bastante bueno» para los planes de pensiones. Más si se tiene en cuenta que el patrimonio de estos ha crecido debido, principalmente, «a las aportaciones netas, con un incremento adicional por el efecto de mercado». La analista achaca esta subida a que «la necesidad de planificar la jubilación se está percibiendo con mayor claridad».

PLANES DE RENTA VARIABLE: LOS MÁS PRODUCTIVOS

Las categorías de planes que mejor comportamiento tuvieron el pasado año fueron las de renta variable, que lograron una rentabilidad del 8,8 por ciento, seguidas por las de renta variable mixta, que tuvieron un retorno del 4,5 por ciento.

Publicidad
Publicidad

«Este es un rendimiento muy interesante en un entorno nada fácil», afirma Mar Barrero, y recuerda que el Ibex-35 cerró el año pasado con una subida del 7,4 por ciento y el EuroStoxx50 con un 6,49 por ciento. «En ambos casos por debajo de la rentabilidad conseguida por el conjunto de los planes de pensiones de bolsa».

La única categoría de planes que sufrió pérdidas el año pasado fue la de renta fija a corto plazo, que se dejó un 0,11 por ciento. En el largo plazo, los planes continúan generando rendimientos positivos para sus partícipes. A 26 años, la rentabilidad media anual es del 4,7 por ciento para el total de planes. Mientras que en el medio plazo, entre 5 y 10 años, presentan un retorno medio anual del 4,4 y el 2,3 por ciento respectivamente. (Ver tabla).

LOS ACTIVOS CRECEN

Publicidad

El volumen de activos de planes de pensiones se situó a diciembre de 2017 en 111.077 millones de euros, y durante el año se incrementó en 4.232 millones de euros, casi un 4 por ciento más. Para Mar Barrero este aumento «es muy reducido» si se compara con el de los fondos de inversión cuyo incremento patrimonial en 2017 fue del 15 por ciento. 

Respecto a las aportaciones acumuladas en el año fueron de 4.979 millones de euros, mientras que las prestaciones ascendieron a 4.543 millones, por lo que las aportaciones netas acabaron 2017 en positivo, sumando 436 millones de euros. También las cuentas aumentaron hasta alcanzar las 9.720.845 y el número de partícipes rondó los ocho millones, ya que algunos tienen más de un plan.

PREVISIONES POSITIVAS

El crecimiento de los planes de pensiones tanto en rentabilidad como en patrimonio continuará este año, auguran los expertos, ya que «la mejora económica que se espera para España en 2018 debería tener su reflejo en el aumento de la capacidad de ahorro de las familias» y ello, unido a las incógnitas sobre la viabilidad del sistema público de pensiones, «debería incidir en el incremento del patrimonio invertido en planes, muy en la línea de 2017», afirma la analista de Profim.

Publicidad

También Manrique se muestra optimista y prevé una «ligera mejoría» en las aportaciones a planes de empleo, en un entorno de consolidación de la recuperación económica, que «repercutirá positivamente en los resultados de las empresas». 

A su juicio, el debate sobre las pensiones públicas va a ayudar a llevar a cabo una reflexión más profunda sobre la contratación de planes, aunque «probablemente no sea suficiente» debido a la falta de conocimiento de los españoles respecto a sus ingresos futuros por pensiones. Apunta que «sería necesario algún estímulo adicional que impulsara de forma definitiva la aportación a planes de pensiones, sobre todo en las empresas».

Por su parte, Paula Mercado vaticina que los mercados este año van a tener un comportamiento peor al de 2017, debido a la «corrección que estamos viviendo, que será menos motivadora para el inversor». No obstante, cree que «cada vez está más claro que el sistema público de pensiones va a ser insuficiente y que se hace necesario tener un plan de inversión que lo complemente».

Y para ese plan inversor los planes de pensiones son «un buen producto», ya que se trata de gestionar el ahorro de largo plazo, asegura Barrero. En su opinión, «desde hace unos años se ha producido una importante mejora en la calidad de la oferta y de la gestión de los planes con la incorporación de boutiques especializadas como Magallanes, Cobas, Gesconsult..., lo que los convierten en un producto más interesante para diversificar los ahorros». 

Para Mercado la idoneidad de los planes de cara a la jubilación se deriva de que ofrecen alternativas para el perfil de cada inversor y poseen un incentivo fiscal «inmediato» y «muy atractivo» que es la posibilidad de desgravar. No obstante, cree que sería necesario «mejorar su fiscalidad» en el momento de rescatar el plan, en que los derechos consolidados -patrimonio aportado más ganancias obtenidas- tributan como rendimientos del trabajo en la declaración del IRPF. «Esto supone una doble imposición sobre el patrimonio aportado y debe revisarse si se desea incentivar las aportaciones a los planes de pensiones».

Publicidad
En portada

Noticias de